• Sábado, 20 de abril 2024
  • ABC

COPE

DEPORTES CÓRDOBA

La historia de Paco Bru, el primer seleccionador español, y su paso como secretario técnico por el Córdoba

Fue plata en Amberes’20 con la España que inventó lo de La Furia y quiso implantar en El Arcángel un sistema llamado “parsiozon” para purificar el ambiente de los vestuarios

Audio

Toni Cruz González
@tonicruzgon

Redacción COPE Córdoba

Toni CruzCórdoba

Tiempo de lectura: 5'Actualizado 10:58

Francisco Bru Sanz -Paco Bru- fue probablemente el primer hombre de fútbol de la historia de España y en su extensa y azarosa vida deportiva hizo escala en Córdoba.

Nació en 1885 en Madrid, aunque también haya quien sostenga que lo hizo en las Filipinas. De joven jugó de back -defensa- en el desaparecido F.C. Internacional y luego en el F.C. Barcelona, con el que logró la Copa de España de 1910. También vistió la blanquiazul del eterno rival Espanyol. Fue un deportista completo de gran planta que dicen que practicó jiu-jitsu, lanzó discos y hata fue forzudo de circo.

Cuando colgó las botas, trabajó de funcionario en el Ayuntamiento de Barcelona y de cronista en Mundo Deportivo. También fue árbitro de primer nivel poniendo incluso orden en finales de Copa. De él se dice que pitó un partido en Cataluña -un Universitari contra Atlético Sabadell- armado con una pistola y que llegó a decir: “Podemos hacer dos cosas: o terminamos con el partido otro día o mañana unos cuantos salimos en las necrológicas”.

Pero si por algo se hizo célebre tras su etapa como futbolista Paco Bru fue por su labor como entrenador. En 1914 dirigió al Spanish Girl's Club, el primer intento de club femenino que hubo en España. Algo muy controvertido en aquellos tiempos. A pesar de sus ideas avanzadas -o merced a ellas- en 1920 se convirtió en el primer seleccionador español, configurando aquel poderoso equipo de la Furia que se hizo con la medalla de Plata en Amberes en los Juegos Olímpicos -que en aquellos tiempos se consideraban como un Mundial-. Tanto del torneo en sí como del regreso, con detención incluida del legendario portero Zamora, contó Bru anécdotas de toda índole. Fue una hazaña para todo el país e incluso Alfonso XIII recibió a ese once del León en San Sebastián con honores de héroes al volver de Bélgica.

Dirigió la selección peruana y arbitró portando una pistola

Bru fue un aventurero al que no le importó afincarse en Cuba para dirigir al singular Club Juventud Asturiana en 1927 antes de convertirse en el entrenador con el que la selección peruana se presentara en el primer Mundial de la historia en 1930. Entre otras experiencias tan alucinantes en su biografía figura una gira por Sudamérica con el Racing de Madrid cuando el club estaba a punto de desaparecer en la que incluso hizo de conspirador para un general peruano.


  • Left6:No existe configuración de publicidad para el slot solicitado


En las biografías de Paco Bru figura que entrenó también al Girona, Granada, Málaga, Zaragoza y… al Córdoba. Esto no es exacto. Paco Bru no fue entrenador del Córdoba -del Real Club Deportivo Córdoba, para ser precisos-, sino su Secretario Técnico durante temporada y media. Bru fue contratado en agosto de 1951 dejando, según su testimonio, su labor como representante del Espanyol en Madrid. Llegaba para dos temporadas a un Deportivo Córdoba que empezaba a padecer una grave crisis económica y, según le contó al legendario reportero Zitro del Diario Córdoba, con la intención de echar su última mano como profesional y consciente de los muchos obstáculos existentes para desarrollar su labor.

El Deportivo Córdoba había completado en la 50-51 la mejor temporada de su historia al acabar quinto en Segunda, por lo que las exigencias eran muy altas a pesar de haber perdido a algunas de sus estrellas como Eguren, Núñez, Uncilla o Méndez, que fue traspasado al Atlético de Madrid.

Bru llegó con un internacional absoluto como Juan Sans del brazo -ex del Sant Andreu, pero con experiencia con el Barcelona-. Suyos también durante ese verano los fichajes de Dimas, Rafa y Cabañas. No así el del primer jugador extranjero que militara en un club de Córdoba, el argentino Antonio Imbelloni. De hecho, en una entrevista explicó Bru que Imbelloni, quien dest acara en San Lorenzo y llegara a jugar en el Real Madrid, había sido un fichaje “de encargo”. Por cierto, el Negro -tal era el apodo del interior zurdo sudamericano- se marchó tras doce partidos y cuatro goles a un equipo portugués con el que, según Bru, llevaba tiempo negociando. Por eso o por la crisis económica que atravesaba aquel Córdoba. Eso sí, al parecer Imbelloni se marchó guardando “un grato recuerdo del pueblo cordobés y de su afición”.

Llegó a un Deportivo Córdoba en crisis económica

Durante su estancia en Córdoba Bru realizaba las alineaciones al alimón con el técnico que ocupaba el banquillo, Carlos Muñiz, tal y como explicó con naturalidad: “él me da sus impresiones y, si las creo convenientes, las acepto: en caso contrario le digo quién tiene que alinearse y llegamos a un acuerdo”. La 51-52 resultó muy dura para el Deportivo Córdoba por las muchas lesiones que sufrió y por la reestructuración de Segunda que planeaba la Federación, que hacía que únicamente los siete primeros clasificados de cada uno de los grupos tuvieran asegurada, mínimo, la permanencia. El Córdoba quedó noveno y su técnico, Muñiz, presentó la dimisión. Su sustituto, Amadeo Navarra, no pudo reconducir el equipo hacia la salvación en una ruinosa fase por la permanencia -la jugaban seis equipos y bajaban cuatro- que, sin embargo, resultó inocua porque la Federación reconsideró al final su postura y el Deportivo Córdoba aunque bajó en el campo conservó la categoría.



Bru preparó la 52-53, pero no la completó como secretario técnico cordobesista. El 14 de enero de 1953, antes de que se cumpliera su contrato, se anunció en el Diario Córdoba que el ex seleccionador nacional dejaba de ser el secretario técnico del Deportivo Córdoba obligado por determinados negocios personales. Había dejado un gran recuerdo tanto en aficionados como en los miembros de la plantilla, que le tributaron una calurosa comida de despedida en el histórico Bar Gol que se encontraba enfrente de El Arcángel. A partir de ese momento, explica José Manuel Zarco en su “El fútbol en Córdoba y provincia desde sus orígenes hasta 1954”, el club entra en barrena: “la marcha del señor Bru vino seguida de una importante crisis deportiva, que tuvo al equipo ocho jornadas sin conocer la victoria y le catapultó a la zona baja”.

Como curiosidad, Bru quiso introducir un extraño aparato llamado parsiozon en la rutina del equipo blanquiverde. El parsiozon era un artefacto que, según Bru purificaba el aire y alejaba todos los malos olores a linimento, sudor y tabaco de los vestuarios.

Al final de esa 52-53 el Deportivo Córdoba bajó a Tercera para nunca más volver. Bru terminó sus días entrenando al Plus Ultra de la Ciudad Lineal ya enfermo y muriendo con poco más que lo puesto en Málaga en 1962.

Córdoba puede presumir de que el primer seleccionador español de fútbol y, probablemente, el primer hombre de fútbol como tal de España trabajara para su representativo. Y puede alardear igualmente de la imagen que se llevó de la afición de El Arcángel Don Paco Bru: “Muy buena, demasiado. Tanto para los locales como para los visitantes. Todos los equipos que pasan por este estadio tienen frases de elogio para este público. Se entiende mucho de fútbol. Más que en muchas capitales y se sabe apreciar lo bueno y lo malo”.

También te puede interesar:

-Miguel Reina,el portero que solo encajó dos goles en Primera en El Arcángel:“Gento no quería jugar en Córdoba"

-El Fantasma Onega: “pude haber jugado en el Granada, pero hubiera sido una traición al Córdoba”

Radio en directo COPE
  • item no encontrado

En directo

La Mañana Fin de Semana

Con Antonio Herraiz

Reproducir
Directo La Mañana Fin de Semana

La Mañana Fin de Semana

Con Antonio Herraiz

Escuchar