La prensa francesa se muestra entusiasmada por la victoria de su selección frente a Bélgica en un partido rudo que le abre las puertas de la final del Mundial, el domingo en Moscú, y a soñar en una victoria como la conseguida en 1998.

"La cabeza en las estrellas", es el título que ocupa la portada de "L'Équipe" sobre el fondo de una imagen de los jugadores de la selección francesa celebrando el gol de cabeza de Samuel Umtiti, el único del encuentro. "Francia puede soñar con un segundo título de campeón del mundo tras la primera estrella de 1998", afirma el diario deportivo, que considera que los 'bleus' estuvieron anoche "fantásticos" por el control frente a los belgas y por su estrategia.

"Pacientes, metódicos, superiores, los 'bleus' doblegaron a Bélgica y dejaron a sus vecinos en la frontera de la felicidad, tristes, al calificarse por tercera vez para la final de un Mundial en 20 años, tras 1998 y 2006", destaca. Dos defensores, Umtiti y Raphaël Varane se llevan los mayores elogios de "L'Équipe", que hace hincapié en que "de nuevo rechazaron todas las ofensivas adversas". A los dos les da una nota de 8 sobre 10, al igual que al guardameta Hugo Lloris y al entrenador, Didier Deschamps. Pero las grandes esperanzas de cara a la final las pone, en particular, en Antoine Griezmann, que querría que fuera igual de decisivo que Zinedine Zidane en la victoria de la final del Mundial de 1998 frente a Brasil.

"Le Parisien" repite en su titular de portada el grito que más se escuchó en las calles de Francia para celebrar la victoria frente a Bélgica: "¡Estamos en la final!". "Al término de 96 minutos duros, Francia gana frente a Bélgica gracias a un gol de Samuel Umtiti. Los 'bleus' se enfrentarán el domingo al vencedor del partido que enfrenta esta noche Inglaterra con Croacia".

En páginas interiores, "Le Parisien" afirma que los franceses están "a las puertas del paraíso" y considera que, sea cual sea el rival en la final del domingo, "serán favoritos para el título supremo". De nuevo el dúo Varane-Umtiti aparece para este periódico como la estrella del encuentro y "la verdadera identidad de este equipo". Considera que el primero, que ya disputó la final de la Liga de Campeones con el Real Madrid el 26 de mayo, "es posible que sea ya uno de los dos o tres mejores defensas franceses de la historia". "Le Parisien" no se priva de ilustrar con fotografías cómo se vivió y celebró el triunfo de los 'bleus' en muchas ciudades de Francia (pero también en Bruselas), y, sobre todo, en la avenida de los Campos Elíseos de París.

El conservador "Le Figaro" apuesta en su primera página por el título "El sueño en azul (bleu) continúa" porque la victoria frente a Bélgica "genera entusiasmo en todo el país antes de la final del domingo en Moscú". "Le Figaro", que hace del partido su tema del día, califica de "heroicos" a sus jugadores que "pueden soñar con una segunda estrella" tras la del Mundial de 1998.

No se queda atrás el diario de izquierdas "Libération", que con su "¡Que llegue el domingo!" pone en evidencia su satisfacción tras lo ocurrido ayer: "un encuentro ajustado y un gol en un córner". En su segunda, "Libération" cuenta que el autor del tanto y el que ha abierto las puertas de la final no es otro que Umtiti, un jugador lesionado que ha tenido que recibir atención por eso "todos los días desde que puso el pie en Rusia".

La prensa belga lamenta el fin de un "sueño", de la "bella aventura" futbolística en que su selección ha embarcado a un país normalmente dividido, y llora con especial amargura que a los Diablos Rojos se les escapase la final por un solo gol frente a la vecina Francia.

"En este partido Francia-Bélgica, un pequeño gol ha marcado la diferencia. Un pequeño gol que transforma un sueño en realidad o en lamentos eternos, según el campo dónde se dé", dice el principal diario francófono belga, "Le Soir", que incide en su titular en ese "pequeño gol que cambia un destino".

También el diario "La Libre Belgique" lamenta que "el sueño se ha terminado" y que esta "generación dorada" de Diablos Rojos "dejó escapar" a los "bleus" franceses que, a su juicio, no eran más fuertes que los belgas. El periódico recuerda que, como en 1986 ante la Argentina de Diego Armando Maradona, Bélgica se ha quedado a las puertas de la final con la salvedad de que "esta vez tenían las piernas para jugar" contra Francia. "Los lamentos pueden ser eternos en nuestro pequeño Reino", dice el periódico, que pone el acento en que para el Mundial de 2022 sus estrellas ya no serán veinteañeros: Vincent Kompany tendrá 36 años, Marouane Fellaini, Dries Mertens y Jan Vertonghen 35, Axel Witsel, Nacer Chadli y Toby Alderweireld 33, recuerdan.

También el diario deportivo digital "Sport" titula: "Los 'bleus' ponen fin a la bella aventura de los Diablos" y destaca la "sorpresa" de que el entrenador, el español Roberto Martínez, decidiese hacer titular a Dembélé. Los medios coinciden en criticar la actuación del mediocentro, que algunos califican de "catastrófica", mientras que destacan el gran partido del portero Thibaut Courtois.

También los medios flamencos lamentan la derrota contra Francia, aunque con un tono menos indulgente que la prensa francófona. El diario "De Morgen" lamenta que "la batalla de San Petersburgo se perdió y no fue para nada una derrota heroica", señalando que en la segunda mitad los franceses jugaron como un equipo "exprimentado". El diario dedica una "oda" a Roberto Martínez, a quien define como "el hombre que enseño a los belgas a soñar" y destaca que "cumplió lo que prometió: un equipo unido que juega un fútbol bonito y llega a alguna parte".

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Por su parte, el diario "Het Neieuwsbald" destaca las alabanzas que dedica la prensa internacional a los Diablos Rojos y hace un repaso a como se vivió el "duelo" entre los seguidores del equipo congregados para ver el partido. Pese a la derrota, los medios belgas, recogen los positivo del camino recorrido y dan las gracias a su equipo.

"Durante algunas semanas Bélgica se ha convertido en el país más 'cool' del planeta fútbol. No es más que un título honorífico, pero fue chulo vivirlo. Gracias", resume "La Libre Belgique".