La existencia de racismo en el fútbol siempre ha sido un tema muy controvertido y más en Italia donde en los últimos años se han producido varios episodios lamentables, el último el pasado fin de semana cuando tres jugadores del Nápoles: Koulibaly, Osimhen y Zambo Anguissa recibieron insultos racistas desde la grada del Artemio Franchi de Florencia.
Uno de los más comprometidos con este tema ha sido Lilian Thuram, exdefensa de Parma, Juventus y Barcelona, que en un congreso celebrado en Trento había afirmado que "los jugadores blancos no deben callar en la lucha contra el racismo", invitándoles a marcharse del terreno de juego cuando se produjeran estos actos.
Thuram ha sido contestado duramente por Marco Materazzi que le acusó de no hacer lo mismo cuando los insultos los recibían alguno de ellos: "Estoy en contra del racismo, pero Thuram nunca salió del estadio cuando cantaron Materazzi hijo de p... Esto es discriminación para el blanco, para el negro y también para el hijo de p...".