La pívot senegalesa nacionalizada española Astou Ndour-Fall vivió su gran sueño de conseguir un título de campeona de la Liga Profesional de Baloncesto de la WNBA después que este domingo su equipo de las Chicago Sky venciesen por 80-74 a las Phoenix Mercury en el cuarto partido de las Finales y ganasen 3-1 la serie al mejor de cinco.

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This one is for you, Chicago. ??

The Chicago Sky are your 2021 WNBA Champions. pic.twitter.com/Pv4KiTzLIA

— Chicago Sky (@chicagosky) October 17, 2021

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Aunque apenas jugó cinco minutos como reserva, y falló los dos tiros de campo, incluido un triple, Ndour-Fall se convirtió en la tercera española que lograba el título de campeona de la WNBA después que ya lo habían hecho anteriormente la escolta-alero Amaya Valdemoro y la alero Anna Cruz.

Ndour-Fall, de 26 años, que llegó a la WNBA en la temporada 2014 cuando firmó con las desaparecidas San Antonio Stars completó su tercera temporada con las Sky desde el 2018, tras disputar la del 2020 con las Dallas Wings, y en la 2021 jugó 20 partidos, ocho como titular, y acabó con promedios de 6,6 puntos; 4,8 rebotes -mejor marca profesional-, 0,4 asistencias; 0,4 robos; 0,8 tapones y 17,1 minutos.

Durante los playoffs de esta temporada, Ndour-Fall jugó ocho partidos, ninguno como titular y aportó promedios de 2,6 puntos; 1,8 rebotes y 8,1 minutos por encuentro.

Valdemoro fue la pionera del baloncesto femenino español cuando llegó a la dinastía de las Houston Comets y las ayudó a ganar tres título del liga consecutivos desde 1998 al 2000.

Luego llegaría Cruz que firmó en el 2014 con las New York Liberty, para en el 2015 llegar a las Minnesota Lynx y conseguir el título de campeonas de la WNBA, el tercero de los cuatro que tienen en su poder.

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Cruz se mantuvo una temporada más con las Lynx para luego irse al baloncesto ruso del Dynamo Kursk.

Ahora, Ndour-Fall, además de ser la jugadora española que más temporadas ha estado en la WNBA, lleva seis, también tiene ya su primer título de campeona y entró a formar parte de la historia de las Sky como la nuevas monarcas del mejor baloncesto femenino del mundo.