El matador de toros Pepe Moral y el novillero Tomás Rufo han aprovechado el final de la temporada europea para pasar ambos por el quirófano y operarse de sendas lesiones que han ido arrastrando a lo largo del año.

El sevillano Moral fue intervenido de una lesión en el menisco y los ligamentos de la rodilla izquierda que se produjo toreando a principios de año en Valdemorillo (Madrid) y que, a pesar del riesgo que conllevaba, no ha sido impedimento para llevar a cabo su calendario con más o menos normalidad.

El de Los Palacios, operado en el hospital Viamed Santa Ángela de la Cruz de Sevilla, ya se encuentra en su domicilio donde deberá guardar reposo antes de empezar la preparación invernal para arrancar la temporada 2020 con las mayores garantías.

Por lo pronto, y además de restablecerse físicamente, deberá encontrar también nuevo apoderado después de su reciente ruptura con Julián Guerra.

El otro torero que ha pasado recientemente por el quirófano ha sido el novillero Tomás Rufo, la gran revelación de la temporada en el escalafón menor, gracias, sobre todo, a la Puerta Grande que abrió en Las Ventas durante la pasada Feria de Otoño.

El joven espada de Pepino (Toledo) sufrió una lesión en el hombro derecho, toreando en el campo el pasado mes de julio.

A pesar de tener que cancelar algunos compromisos, Rufo sí hizo frente a los más importantes sobre todo el de la Feria de Otoño dónde salió a hombros tras ofrecer una gran tarde y refrendar así el buen sabor que dejó en el certamen de novilladas nocturnas celebrado también en Las Ventas durante el mes de julio.

Ahora deberá guardar reposo, con el brazo inmovilizado, antes de comenzar a preparar su próxima temporada en la que tendrá el reto de corroborar la buena imagen mostrada este 2019. EFE.