Cristiano Torres corta una oreja en la cuarta del Zapato de Oro de Arnedo (La Rioja)

El novillero zaragozano Cristiano Torres es el único que ha cortado una oreja este domingo en la cuarta de la feria del Zapato de Oro de Arnedo (La Rioja).

Se han lidiado seis novillos de Guadalmena, muy bien presentados, salvo el primero más terciado. De embestida descompuesta el primero; parado y soso el segundo, nobles tercero y cuarto; el quinto falto de raza y con más acometividad el sexto.

Tras el paseíllo, se homenajeó al torero arnedano Diego Urdiales por cumplirse hoy 25 años de haber conseguido el Zapato de Oro. Víctor García, "El Víctor", saludó tras parear al que cerró plaza.

El riojano Fabio Jimenez tuvo un primero que por los dos pitones siempre protestó al final de los lances echando la cara arriba. El alfareño puso voluntad y acabó siendo volteado sin consecuencias. En su segundo no encontró acople perdiendo pasos y sufriendo algún desarme en faena, que fue poco a poco desvaneciéndose.

El albaceteño Caballero no pudo expresar sus maneras con el que hizo segundo, un novillo soso y que se quedó en la casilla de salida. Fue trasteo huérfano de emoción, al igual que el que instrumentó al que hizo quinto; un animal falto de raza y sin codicia.

Cristiano Torres, último Zapato de Plata, cortó oreja a su primero, un toro con un punto de sosería que solventó el maño poniendo mucho de su parte. Inicio y final de faena con corte galerista dejando entre medio series importantes sobre todo al natural. Mató de estocada fulminante. Hubo petición de un segundo trofeo que el palco no atendió.

Al que cerró plaza dejó dos buenos pares "El Víctor", de lo mejor hasta ahora en la feria. Torres lo sobó por el derecho e hizo que humillara un novillo que tuvo fijeza y más acometividad que sus hermanos. Prendido sin consecuencias, al inicio por el izquierdo siguió en redondo. Bullidor hizo cómplice a la grada con derechazos y espaldinas incluidos.Mató mal y perdió la puerta grande.

Fabio Jiménez: silencio y palmas tras aviso.

Manuel Caballero: silencio y algunas palmas.

Cristiano Torres: oreja y ovación.

Casi la mitad del aforo cubierto en la cuarta de la feria del Zapato de Oro de Arnedo. EFE

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