El Consejo Superior de Investigaciones Científicas ha lanzado Conexión Nanomedicina (NanomedCSIC), una nueva red de colaboración científica para impulsar la investigación en nanomedicina.

NanomedCSIC es una plataforma abierta a todos los grupos del CSIC que trabajan en este campo y su objetivo es impulsarlo mediante la aplicación de tecnología a nivel atómico y molecular para mejorar la detección y tratamiento del cáncer, de enfermedades cardiovasculares o de patologías infecciosas.

"El campo de la nanomedicina requiere un enfoque multidisciplinar, combinando el trabajo en áreas clásicas como la química o la biología, y esto es algo que se ve claramente reflejado en los grupos de la red", señala en una nota Fernando Herranz, director del Grupo de Nanomedicina del Instituto de Química Médica.

La nanomedicina consiste en la aplicación de la nanotecnología, es decir, de materiales con un rango de tamaño alrededor de los 100 nanómetros, para afrontar problemas biomédicos como el diagnóstico precoz, la aparición de nuevos tratamientos con nanomateriales terapéuticos o el transporte eficiente de fármacos.

Para impulsar este campo multidisciplinar mediante nuevos proyectos, colaboraciones internacionales y una mayor coordinación con diferentes instituciones, tanto públicas como privadas, Conexión Nanomedicina se articula en torno a cinco líneas de actividad: gestión global, planificación y posicionamiento, atracción de talento joven, movilidad y comunicación.

Coordinada por Fernando Herranz y María del Puerto Morales, directora del Grupo de Materiales para Medicina y Biotecnología del Instituto de Ciencia de Materiales de Madrid, la nueva red pretende crear una conexión sostenible a medio y largo plazo entre el personal investigador de los diferentes institutos del CSIC.

Esta labor implica a doce grupos de trabajo que perseguirán la transferencia de conocimiento, el desarrollo de actividades conjuntas y el intercambio de personal investigador.

Entre los centros incluidos están el Centro Nacional de Biotecnología; el Instituto de Química Avanzada de Cataluña; el Instituto de Investigaciones Químicas; el Instituto de Nanociencia y Materiales de Aragón y el Instituto de Ciencia de Materiales de Madrid.

Esta iniciativa se suma a la creación de la red Conexión-Cáncer, que aglutina a los centros del CSIC que estudian esta enfermedad. EFE

ngg/cc