El director del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), Cristóbal Belda, ha señalado que es "fundamental que la medicina de precisión, la oncología de precisión, se despliegue de manera cohesionada dentro de todo el Estado".

"Que nadie, absolutamente nadie en todo el país, acceda a distintas velocidades a la sanidad, en función de dónde resida, trabaje o dónde pague impuestos".

Belda ha hecho estas manifestaciones en la clausura del Foro "Pasado, presente y futuro de la Oncología", un encuentro organizado por EFE y AstraZeneca con el objetivo de mantener el cáncer como una enfermedad relevante en la agenda pública y promover la investigación y la innovación.

En su intervención, el director del ISCIII se ha referido al Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) para la Salud de Vanguardia, que recibirá entre este año y hasta 2023 un total de 1.469 millones de euros -982 millones del sector público y el resto del privado- para impulsar la creación de un sistema sanitario de altas prestaciones.

Presentado el pasado 15 de noviembre, este plan se marca entre sus objetivos posicionar a España como país líder en la innovación y desarrollo de terapias avanzadas orientadas a la curación de enfermedades como la diabetes, e impulsar la implementación equitativa de una medicina personalizada de precisión.

"Los oncólogos nos podemos ver ampliamente reconocidos en este plan", ha subrayado Belda, quien, en su intervención, se ha detenido en la medicina de precisión.

Hay, ha subrayado, ahora un objetivo fundamental y "muy decidido" de implementarla dentro del sistema nacional de salud; "esto es algo que todos los oncólogos y oncólogas llevamos oyendo hablar más de diez años".

"Las palabras tienen todo el sentido del mundo siempre y cuando se acompañan de actos. Lo importante son los actos y las cosas que permanecen después de las distintas personas que van pasando".

A su juicio, el despliegue de esta onología/medicina de precisión se tiene que hacer manera cohesionada dentro de todo el Estado.

Belda se ha referido también a las terapias avanzadas y a la digitalización, ambos retos incluidos en el Perte.

Con este plan se espera desarrollar un sistema de salud digital, con una base de datos integrada que permita la recogida, tratamiento, análisis y explotación de los mismos para mejorar la prevención, atención, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación e investigación.

Se trata, ha resumido Belda, de trabajar con los datos de los pacientes y sus familias para intentar mejorar la capacidad asistencial, una reivindicación también histórica de los oncólogos.

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"Creo profundamente que, a través del Perte y las distintas acciones desde el ISCIII con otras organizaciones, de forma concreta con la Sociedad Española de Oncología, seremos capaces de aportar más vida a aquellos que vienen buscando la esperanza a nuestras consultas".