La Xunta, a través de Augas de Galicia, ha eliminado un punto de vertido de aguas industriales registrado en la parroquia pontevedresa de Ponte Sampaio, que afectaba al río de Ponte Nova, afluente del Ulló.

Los técnicos del Plan de Control de Vertidos realizaron una inspección en la zona tras la notificación por parte del Servicio de Emergencias del 112 de este vertido.

En concreto, la inspección desarrollada en el lugar del Rañadoiro permitió verificar que una parte de las aguas de escorrentía generadas en la actividad de una empresa de la zona no seguían el sistema de depuración existente, y se vertían hacia el terreno circundante en condiciones inadecuadas.

La Xunta le notificó esta situación a la entidad, requiriéndole la adopción de las medidas oportunas para enmendarla. La empresa procedió a instalar un canal de recogida perimétrica, que permitió recoger la totalidad del caudal de las aguas.