El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha enviado una carta al presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, en la que pide "una reflexión en profundidad" de las instituciones democráticas de Europa, y "una estrategia compartida que incluya iniciativas a corto, medio y largo plazo" en política migratoria.

El Gobierno Vasco ha informado de esta misiva en la que Urkullu reivindica un programa que "calcule las necesidades y recursos disponibles" y que plantee "un compromiso colectivo de la comunidad Internacional para actuar en los países de origen".

"Euskadi está dispuesto a secundar este esfuerzo compartido", encaminado a poner en marcha "un programa de actuación institucional que evite el sufrimiento de tantas personas y familias en el continente de África", ha expuesto Urkullu.

El Ejecutivo autonómico también ha informado de que no tiene constancia de que "se estén produciendo 'entregas en caliente'" de inmigrantes desde Francia y ha asegurado que la Policía gala está haciendo devoluciones a la Policía Nacional "por los procedimientos establecidos en los acuerdos bilaterales en materia de Extranjería entre Francia y España".

El Ejecutivo autonómico, que recuerda que esta cuestión "desborda" sus competencias, ha exigido que "todos los procedimientos en la gestión fronteriza de migrantes en tránsito respeten la legalidad, las garantías y derechos humanos".

En el marco de sus competencias las instituciones vascas trabajan "para ofrecer una respuesta humanitaria y justa" tanto para los migrantes en tránsito, como para aquellos que decidan quedarse en Euskadi.

Por ello desde que en 2015 comenzó la crisis humanitaria en el mediterráneo, el Gobierno Vasco ha mantenido "una interlocución ininterrumpida" el Gobierno central después para "mejorar la coordinación" y dar un mayor protagonismo en este tema a las administraciones autonómicas y locales.