El consejero de Sanidad extremeño, José María Vergeles, ha anunciado que, una vez finalizada la vacunación de los mayores de 80 años, se dará "prioridad" a un nuevo grupo integrado por personas trasplantadas, pacientes que realizan diálisis por una enfermedad renal crónica, pacientes oncológicos en tratamiento y, en general, pacientes inmunodeprimidos.
Lo ha avanzado en rueda de prensa posterior a la reunión esta tarde del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.
Vergeles ha indicado que hay "un amplio consenso" en la Comisión de Salud Pública en cuanto a la vacunación de este grupo formado por personas que "padecen enfermedades que se ven muy afectadas por la covid-19".
En la reunión se ha abordado además la estrategia de cara a Semana Santa, donde Extremadura ha planteado "una acción coordinada" de todas las comunidades, incidir en la limitación de movilidad, asumiendo si se adoptase el cierre perimetral, controlar los eventos sociales y mantener los días previos y posteriores a la festividad puntos activos para someterse de forma voluntaria a pruebas diagnósticas.
En cuanto a la movilidad, ha precisado que, además de los controles aleatorios, a lo mejor sería conveniente que a las personas que se muevan de comunidades de más incidencia a las de menos -entre las que se encuentra Extremadura-, habría que exigir "una prueba negativa o certificado de vacunación". EFE