El Ayuntamiento de Tarragona estudia solicitar la declaración de zona catastrófica tras el temporal de este pasado viernes, cuyos cuantiosos daños materiales todavía se están evaluando, según ha informado el consistorio.

El temporal, con registros de más de 130 litros de lluvia por metro cuadrado en menos de tres horas, afectó sobre todo a los barrios de Llevant y las zonas más próximas al litoral, sin lamentar daños personales.

Parte de la calzada de la calle del Sol se derrumbó en el patio de la escuela El Miracle, que quedó inutilizado al estar tres cuartas partes ocupadas por los escombros.

Sin embargo, las clases se han iniciado este lunes con total normalidad y se han buscado espacios alternativos para poder disfrutar del tiempo dedicado al patio.

El ayuntamiento también ha empezado a reparar de urgencia aceras y pavimento de numerosos puntos de la ciudad, arrancados de cuajo por la fuerza del agua y está evaluando los daños de un tramo de la muralla del castillo de Ferran.

De momento, ha calculado que reparar los destrozos del complejo deportivo Tennis Park, en el barrio de Cala Romana, superará el medio millón de euros y el Club de Vela, con numerosas embarcaciones afectadas, estudia ya como protegerse de más episodios de aguaceros.