El Juzgado de Instrucción 4 de Amposta (Tarragona), en funciones de guardia, ha dictado una orden de alejamiento y la prohibición de comunicarse con las víctimas al trabajador de un geriátrico de Alcanar (Tarragona) investigado por presuntamente de agredir sexualmente a dos residentes del centro.

Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC), el juez ha dictado libertad con medidas cautelares, entre ellas también una orden de alejamiento de 300 metros de la residencia y la obligación de comparecer cada quince días en el juzgado.

La policía catalana tuvo conocimiento de los hechos cuando una persona residente del centro, de 85 años, fue al colegio electoral con sus familiares para ejercer su derecho a voto y no quiso volver a la residencia, explicando que había sido víctima de varias agresiones sexuales por parte de un trabajador.

Los agentes tomaron declaración a varios residentes y trabajadores, y descubrieron que otra persona también había sufrido abusos; la causa está abierta por un presunto delito de agresión sexual, y las diligencias se emitirán al decanato para su reparto entre los juzgados de Amposta para seguir con la instrucción.

El Ayuntamiento de Alcanar ha lamentado estos hechos "extremadamente graves y totalmente inaceptables" y se personará como acusación popular, y está en contacto con la Conselleria de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias, los Mossos d'Esquadra, la Policía Local de Alcanar y la dirección del centro, según un comunicado.