Especialistas del Centro Oftalmológico Barraquer de Barcelona han advertido que un 20 % de la población infantil tiene algún problema visual, lo que significa que uno de cada 4 escolares sufre algún trastorno de la visión, que es una de las principales causas de bajo rendimiento escolar.

La doctora Idoia Rodríguez Maiztegui, oftalmóloga pediátrica del Centro de Oftalmología Barraquer, ha advertido del crecimiento en los próximos años de estos problemas visuales infantiles, especialmente la miopía, a causa del incremento del uso de la visión cercana, provocado especialmente por el empleo de dispositivos electrónicos, y ha recomendado hacer una revisión ocular antes del inicio escolar, que en Cataluña comienza el próximo lunes.

Según Rodríguez, los problemas visuales no corregidos son una causa frecuente de falta de atención en clase, retraso en la lectoescritura y descenso en el rendimiento escolar.

La oftalmóloga ha reconocido que una de las dudas más recurrente de las familias es cuándo llevar a los niños a una primera revisión ocular.

"Tras una primera valoración llevada a cabo por el neonatólogo o pediatra en el nacimiento, es alrededor de los 2 años cuando se recomienda un examen ocular completo por parte del especialista para evaluar el segmento anterior y posterior del globo ocular, detectar posibles defectos de refracción y descartar la presencia de estrabismo u ojo vago", ha explicado Rodríguez.

"Si existen antecedentes familiares de patología ocular o derivación por parte del pediatra, es conveniente hacer la revisión con anterioridad. A partir de este momento, y aunque no exista sintomatología, lo ideal sería realizar una revisión anual hasta los 8 años, momento en que finaliza el aprendizaje visual. Posteriormente podemos espaciar los controles a bianualmente hasta alcanzar la mayoría de edad", ha aconsejado.

Más allá de las revisiones periódicas, la oftalmóloga también ha recomendado algunas pautas para mantener una buena salud ocular como "trabajar con luz, preferentemente natural, en un ambiente ventilado, cuidando la postura corporal y la distancia del ojo al papel, hacer descansos periódicos, utilizar el modo noche en las pantallas e intentar no abusar de dispositivos electrónicos".

"Deberíamos evitar que los niños de menos de 3 años utilicen dispositivos electrónicos. Los niños de 3 a 6 años deberían usarlos un máximo de una hora diaria, mientras que de los 6 a los 16 años el tiempo máximo debería ser de 2 horas, incluyendo descansos periódicos", según la oftalmóloga.