La Guardia Civil de Melilla ha informado este jueves de que los narcotraficantes han modificado su 'modus operandi' para tratar de introducir la droga en la Ciudad tras el cierre de los puestos fronterizos por la crisis del coronavirus, lanzando la droga por encima de la doble valla de seis metros cada una que la separa de Marruecos.

Un portavoz de la Comandancia ha explicado que, con motivo del cierre de los controles fronterizos terrestres a causa de la alerta sanitaria con objeto de evitar la propagación de contagio del coronavirus, el Instituto Armado ha constatado en pocos días como los narcotraficantes han modificado su 'modus operandi' en su intento de seguir con el tráfico de drogas a menor escala, conocido en el argot como 'al menudeo' o 'trapicheo'.

Para llevar a cabo las medidas tomadas por el Gobierno de la nación y las impartidas en la Ciudad desde la Delegación del Gobierno, ha añadido la citada fuente, la Guardia Civil ha intensificado los controles en zonas sensibles, como los accesos a la carretera de circulación en determinados tramos, playa de Horcas Coloradas, Dique Sur e inmediaciones de los controles fronterizos, entre otros.

El dispositivo implantado y esas medidas decretadas, ha detallado, ha hecho que los narcotraficantes intenten introducir la droga a través del vallado fronterizo, para lo cual "envuelven la droga en cintas de embalaje" al que unen un palo o cualquier otro elemento y las lanzan a través del vallado, donde otros las recogen para su venta al menudeo en distintos puntos de la ciudad.

De hecho, ha confirmado que, en estos pocos días, "han sido varias las aprehensiones realizadas al localizar la droga en el suelo en las inmediaciones del vallado", que suman del orden de unos cinco kilogramos de drogas del tipo hachís.

Esa droga tiene su procedencia en ese lanzamiento a través del vallado, o bien sus portadores se deshacen de ella antes de llegar a los controles establecidos, "impidiendo de esta forma la Guardia Civil que se introduzca en el tráfico de drogas a menor escala y que tiene como potenciales compradores a jóvenes".

El portavoz policial ha asegurado que el tráfico de drogas a todas las escalas constituye uno de los ejes principales de actuación de la Comandancia y en lo que va de año se llevan intervenidos en la Ciudad unos 800 kilogramos de drogas del tipo hachís y un kilogramo de cocaína, mientras que han sido más de 120 las denuncias impuestas a ciudadanos por su tenencia o consumo en lugares públicos.