La pandemia ha desestabilizado el sistema de salud y ha impactado brutalmente en los pacientes no covid y si no se actúa de forma urgente, los retrasos se cronificarán y el impacto sobre la mortalidad y morbilidad será enorme, ha denunciado este miércoles la Federación de Asociaciones Científico Médicas (Facme).

Esta Federación, que agrupa a 46 sociedades, ha elaborado un documento 'Impacto de la covid-19 en los no covid', que ya ha trasladado al Ministerio de Sanidad, donde no se mide el impacto de la pandemia pero sí se recogen experiencias publicadas que constatan, por ejemplo, que los nuevos diagnósticos de cáncer disminuyeron un 21 % en la primera ola y la mortalidad aguda por infarto se dobló en las primeras fases, con una reducción del 40 % de los tratamientos.

Según el documento, presentado por la presidenta de Facme, Pilar Garrido, hay que recuperar a los pacientes crónicos "que se han quedado fuera del radar del sistema e identificar a los más vulnerables" por lo que urge "romper el círculo vicioso covid-no covid" y recuperar la actividad pospuesta en todos los niveles: Atención Primaria y entorno hospitalario.

El documento, presentado en rueda de prensa, pone el foco en los pacientes crónicos pospuestos, en los diagnósticos perdidos, en las carencias en rehabilitación y servicios de seguimiento y en los aumentos de tiempo de espera en tratamientos y cirugías.

Y es que la pandemia ha generado, dice el texto, "retrasos significativos en la atención no covid, tanto en lo preventivo como en los diagnósticos y lo curativo" y en todos los grupos poblacionales, desde recién nacidos hasta adultos y personas mayores.

Garrido ha admitido que la pandemia ha afectado "en todas las áreas, en todas las enfermedades y en todos los pacientes" y ha defendido actuar "de forma diferente" porque "ahora tenemos los pacientes de la pandemia, todo lo acumulado de agudo y crónico y los nuevos crónicos no covid. El manejo de todo esto es el objetivo del ensayo, no cuantificar qué ha pasado".

"Estamos en un momento decisivo. El sistema de salud se ha desestabilizado y es necesario estabilizarlo. Eso se puede hacer bien o mal", ha señalado.

Aquí, el vicepresidente de Facme, Javier García Alegría, se ha referido a la parte propositiva del documento que apunta a los fondos de recuperación europea y a los presupuestos anuales para fortalecer el sistema y que sus profesionales puedan enfrentar en el futuro situaciones como las vividas, con menor vulnerabilidad.

García Alegría ha apostado porque sean las sociedades científico médicas las que definan estándares y criterios generales para priorizar a los pacientes en la atención no covid y ordenar la gestión con garantías de calidad y seguridad clínica.

Entre las propuestas que recoge el texto está la creación de un observatorio de recuperación y fortalecimiento del sistema de salud que "monitorice y vele por la recuperación del sistema, interviniendo en las desigualdades que la amenazan".

Con estos nuevos criterios de atención, las sociedades científico médicas confían en una "recuperación óptima" de los pacientes demorados pero también demandan "más proactividad" en los procesos diagnósticos, mejor manejo de los crónicos y asignación de nuevos recursos, como los fondos europeos y los presupuestos anuales.