Una enfermera, un médico, un paciente y el familiar de una víctima del coronavirus son las personas que ponen "el rostro" en cuatro vídeos a una campaña promovida por las 25 organizaciones que conforman la alianza Más Sanidad, con la que quieren denunciar el colapso sanitario tras nueve meses de pandemia.

"Dar la cara por la Sanidad" es el nombre de la campaña que recoge, en cuatro vídeos publicados en redes sociales, los testimonios de cuatro personas: Esther, enfermera, que en la primera ola trabajó en un gimnasio habilitado para pacientes Covid; Elena, médico que recuerda las jornadas maratonianas y la falta de protocolos; María José, cuyo padre falleció en casa sin recibir la máquina de oxígeno que prometió el hospital; y Orquídeo, un hotelero en paro y contagiado.

Con estos testimonios, los promotores de la campaña, que van desde Médicos del Mundo, semFYC, sindicatos, consumidores y mesas de la salud pública hasta un total de 25 organizaciones, exigen a los representantes políticos que "den la cara" y que sean conscientes de cómo mucha gente asiste "perpleja" a cómo vuelven a repetirse las escenas que ya vivieron hace ocho meses.

En la campaña, las organizaciones también subrayan que el incremento de gasto sanitario de 64 euros por habitante y año que contiene el borrador de presupuestos está "muy lejos" del necesario aumento de 1.000 euros por habitante y año que vienen reclamando.

Además, critican que cada comunidad autónoma pueda decidir unilateralmente a qué destinar los fondos que recibe el Gobierno y que suponen más del 80 por ciento del gasto sanitario público.

Dejan claro que al tratarse de fondos no finalistas, el destino de estas partidas es responsabilidad de los gobiernos regionales a través de los presupuestos autonómicos, "algo que puede generar una desigualdad enorme entre las autonomías en función de cómo decidan distribuirlos".

En la campaña, las 25 organizaciones también se decantan por la exención de copagos a nuevos colectivos de personas vulnerables, una reforma de la política farmacéutica, el blindaje frente a las privatizaciones y una potenciación real de la Atención Primaria.

Se trata, en definitiva, dicen, de acabar con los problemas estructurales que afectan a la sanidad española y hacer frente a futuras pandemias.