Mientras la tercera ola va acabándose en Cataluña, donde el peligro de rebrote ya está al mismo nivel que en la finalización de la segunda, a principios de diciembre, la tensión hospitalaria se mantiene alta, con los pacientes saliendo de la UCI con cuentagotas.

La situación epidémica y la presión hospitalaria siguen mejorando lentamente en Cataluña, donde en las últimas 24 horas se han diagnosticado 1.452 nuevos contagios y se han reportado otras 26 muertes por COVID.

Según los datos epidemiológicos actualizados este viernes por el Departamento de Salud, el número de pacientes hospitalizados es de 1.470, un total de 33 menos que la víspera, de los que 465 están en la UCI, 6 menos, una cifra que no se daba desde el 10 de enero, hace dos meses, y que son 266 pacientes graves menos que el pico en las UCI en esta tercera ola, el 1 de febrero, cuando había 731 enfermos críticos de COVID.