La Guardia Civil ha abierto una investigación sobre el accidente que tuvo lugar este miércoles en la central nuclear de Ascó (Tarragona), en el que un bombero murió y tres personas resultaron heridas por inhalación de CO2.

La Benemérita ha abierto diligencias sobre el suceso --que afectó a seis personas en total-- y está tomando declaración a responsables de la empresa, han informado a Europa Press fuentes del cuerpo.

Según explicaron los Bombers de la Generalitat, en el momento del incidente los afectados estaban trabajando en el sistema contra incendios, que funciona con CO2, en el marco de las tareas de mantenimiento de la central nuclear.

El cuerpo de emergencias constató que el suceso no estuvo "vinculado a la actividad radiológica" de la central y se retiró una vez restablecida la seguridad en el recinto.

El Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) trasladó a los tres heridos al hospital de Móra d'Ebre (Tarragona), donde fueron atendidos por inhalación de CO2.