El Gobierno central ha asegurado este martes que "trabaja intensamente" para que ninguno de los migrantes irregulares que han pasado el trámite de reseña policial en el dispositivo instalado en el muelle de Arguineguín (Gran Canaria) pasen la noche en la calle.

"En este sentido, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y la Secretaría de Estado de Migraciones han dado instrucciones para que estas personas, si así lo desean, sean derivadas a plazas del sistema de acogida", aseguran a través de un comunicado remitido a los medios de comunicación a través de la Delegación del Gobierno en Canarias.

En ese texto, la Delegación explica que el Gobierno concentra "todos los esfuerzos en que estas personas dispongan cuanto antes de un recurso alojativo digno". Además, aseguran que continúan con "las gestiones necesarias para dar respuestas efectivas ante esta crisis migratoria".

Por su parte, el presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha reclamado al Ejecutivo central que "no vuelva a suceder" una situación como esta.

"Ante el comunicado de Ministerio del Interior y salida de inmigrantes, reclamamos desde el Gobierno canario que se aclare lo ocurrido y que no vuelva a suceder", ha aseverado Torres a través de una red social.

Además, según fuentes consultadas por Europa Press el presidente regional está centrado en realizar gestiones de emergencia para que esta noche nadie duerma a la intemperie.

Los en torno a 200 inmigrantes desalojados esta tarde del muelle de Arguineguín, en el sur de Gran Canaria, han llegado a Las Palmas de Gran Canaria y aguardan en su mayoría en la plaza frente a la sede de la Delegación del Gobierno en Canarias.

El grupo de migrantes de origen magrebí fue trasladado en tres autobuses dispuestos por el Ayuntamiento de Mogán hasta la Plaza de la Feria, un céntrico enclave de Las Palmas de Gran Canaria, donde se sitúa la sede principal de la Delegación del Gobierno en el archipiélago.

Permanecen en la Plaza, la mayoría con las mismas sudaderas negras, las mascarillas puestas y sus móviles como únicas pertenencias, sin que hasta el momento se sepa si pasarán la noche en la calle.

Hasta el lugar se han desplazados varios representantes de ONG así como vecinos, que les han llevado agua, fruta y algo más de comida. En el entorno hay al menos presencia de dos furgones de la Policía Nacional, uno en la misma puerta de la Delegación del Gobierno y otro justo delante de donde están agrupados la mayor parte de los inmigrantes, en la calle León y Castillo.