El secretario general para el Reto Demográfico, Francesc Boya, ha advertido este miércoles en Salamanca de que la falta de gestión de los bosques "aboca" a los incendios forestales y ha pedido una "reflexión" sobre la necesidad de tener un medio rural vivo.

Antes de participar en la Universidad de Salamanca (USAL) en un Coloquio Ibérico de Geografía, Boya ha reconocido, ante los periodistas, que la sociedad actual requiere de unos territorios que "antes parecían orillados y que ahora están en el centro del debate".

Se trata del medio rural que, en su opinión, en estos momentos dispone de un contexto "favorable", con unos elementos claves como las energías renovables, los bosques, el agua y la alimentación, que pueden permitir la recuperación de un "tiempo perdido" respecto al reto demográfico.

"El gran reto es colocar las piezas para que los territorios recuperen funcionalidad y puedan dar oportunidades a las personas que quieran vivir en ellos y puedan hacerlo con una calidad de vida razonable. La demografía vendrá después, llegará la mejora de la situación demográfica", ha planteado.

Sin embargo, Francesc Boya ha advertido de que los incendios forestales pueden poner en peligro la vida en el medio rural por lo que ha pedido "una gestión de los bosques, aprovechar los recursos que ofrecen, porque es la mejor garantía de que no se quemen".

Así, al ser preguntado por el incendio en la Sierra de la Culebra, en Zamora, que ha arrasado más de 25.000 hectáreas, ha sostenido que los "bosques son un elemento vivo, que tienen un proceso y que hay que gestionarlo" y ha agregado: "la no gestión no es una opción porque nos acaba abocando al incendio".

Para Boya, es necesario reflexionar sobre los incendios forestales pero desde "el rigor", para evitar que se produzcan estos fuegos que, "lamentablemente y con el cambio climático", se van a sufrir "en más ocasiones".

Por otra parte, y preguntado por la posibilidad de cazar el lobo en Castilla y León, Boya ha insistido en su idea de llegar a acuerdos entre "la protección de la biodiversidad" y la posición de los ganaderos, equilibrios que "a veces son difíciles".

"La política es el arte que nos permite encontrar, desde la discrepancia, posiciones de consenso. Pero hay objetivos irrenunciables, como la preservación de la biodiversidad y la actividad tradicional como la ganadería", ha agregado.