Un acuerdo con el Servicio de Salud del Principado (SESPA) y la mutua Fremap para su atención médica ha permitido hoy poner fin a la huelga de hambre que desde hace 19 días mantenían cuatro de los intoxicados en 2012 por mercurio mientras trabajaban en la factoría que Asturiana de zinc (AZSA) tiene en San Juan de Nieva, en Avilés.

La firma de un convenio que les permitirá recibir atención médica especializada mientras mantengan las secuelas derivadas de la intoxicación, y cuya renovación será automática cada dos años, les ha llevado a poner fin a esta protesta "temporalmente", ya que no han dado por conseguidos todos sus objetivos.

Los afectados por la intoxicación siguen reclamando a la dirección de AZSA que continúe haciéndose cargo del coste del equipo de toxicólogos que les atendió hasta 2016.

Tras este acuerdo, los cuatro trabajadores han levantado el campamento en el que desde el pasado 30 de octubre han seguido esta huelga de hambre, frente a las instalaciones de AZSA en San Juan de Nieva.

Los cuatro, que forman parte de los 49 afectados por el accidente ocurrido en las instalaciones de Azsa hace casi seis años se pusieron en huelga de hambre para conseguir que se prorrogase el acuerdo de asistencia firmado con el Servicio de Salud del Principado y la mutua Fremap para un periodo de dos años.

Con el acuerdo alcanzado hoy, la atención sanitaria a este colectivo quedará garantizada con la renovación automática del convenio cada 24 meses, siempre y cuando los pacientes afectados por la intoxicación continúen con la alteración de su salud.

Estos trabajadores de la empresa Ingeniería Montajes Norte (IMSA) realizaban en diciembre de 2012 tareas de mantenimiento en la planta de tostación de Azsa donde fueron expuestos a mercurio y otros metales pesados, que con el tiempo les ha ido acarreando distintas dolencias.