La comunidad docente de la escuela Pare Manyanet, una de cuyas alumnas se suicidó en mayo por presunto acoso escolar, ha afirmado que, ante indicios de hostigamiento, el centro "ha actuado de forma inmediata y coordinados con los responsables de las administraciones", y ha negado que muchos alumnos hayan abandonado el colegio por intimidación.

De este modo, en un comunicado, el equipo docente del colegio Jesús, Maria i Josep, conocido como Pare Manyanet, en Barcelona, se ha referido a las informaciones aparecidas en los medios de comunicación tras el suicidio de su alumna, en las que se afirma, aportando testimonios directos, que numerosos alumnos han abandonado el colegio por sufrir acoso.

Por contra, el colegio ha asegurado haber recibido "muchos alumnos que venían de situaciones complejas y se han encontrado a gusto con nosotros", y que en los últimos diez años la escuela ha abierto ocho expedientes por indicios de acoso en los que la administración educativa ha concluido que no lo había.

Sobre el suicidio, que están investigando los Mossos, la Conselleria de Educación y el Síndic de Greuges, el equipo docente se ha mostrado esperanzado en que "una vez llevadas a cabo todas las diligencias, contrastados los hechos y finalizadas las investigaciones, se pueda saber qué pasó" porque, "si algo no se ha hecho bien, seremos los primeros en exigir responsabilidades y promover los cambios pertinentes".

Los docentes han afirmado que en los días posteriores a la muerte de la alumna, que tuvo lugar en el mes de mayo, "tuvimos que hacer de tripas corazón y dedicar todos nuestros esfuerzos a acompañar a los alumnos y a sus compañeros en el proceso de duelo".

Al respecto, el pasado 10 de junio, el responsable de la unidad de cumplimiento normativo y portavoz del centro educativo, Antonio Ruiz, aseguró a EFE que en el colegio "no constaba ninguna incidencia ni ninguna acción vía tutoría, ni queja formal por parte de la familia", por lo que supieron la noticia del suicidio esa misma mañana y que les había dejado "totalmente sorprendidos".

Sobre la familia de la alumna, el equipo docente afirma: "La hemos tenido muy presente en todo momento". Entiende, además, que "en la absoluta desesperación surjan mil preguntas sin respuesta".

Asimismo, ha criticado las "insinuaciones sin ninguna prueba" aparecidas en las redes sociales y en algunos medios de comunicación, donde, se lamenta, "han aparecido ataques personales con nombres y apellidos de profesionales del centro".