La Unión Europea enviará una misión técnica a Marruecos y Mauritania próximamente para abordar con las autoridades ayuda europea para que controlen sus fronteras en respuesta al aumento de la llegada del número de inmigrantes a Europa a través de la ruta del Mediterráneo occidental, es decir, desde Marruecos a España.

"Estamos intentando discutir con Marruecos y Mauritania, donde creo que una misión técnica de la Unión Europea se desplazará esta semana o la siguiente para discutir juntos las medidas más apropiadas que podemos apoyar para hacer que el trabajo que están intentando hacer sea más eficaz, para un control más apropiado, más adecuado a los flujos migratorios", ha explicado en rueda de prensa la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, en rueda de prensa al término de la reunión de los ministros de Exteriores de los 28 en Luxemburgo.

Mogherini ha explicado que los europeos han acordado "aumentar" la ayuda "especialmente con Marruecos y Mauritania" tras constatar que el número de llegadas de inmigrantes a través del Mediterráneo occidental han crecido un 150%, mientras que las llegadas a través del Mediterráneo Central --de Libia a Italia-- han caído entre un 80 y 85% este año.

"Hemos acordado aumentar nuestro trabajo, en particular con Marruecos y Mauritania", ha subrayado la jefa de la diplomacia europea.Mogherini ha explicado que ya se están poniendo en marcha "algunas nuevas medidas" como "fondos que serán asignados para cooperar con estos países para gestionar juntos la ruta del Mediterráneo occidental" y ha insistido en el interés común compartido para gestionar los flujos de forma "transparente, ordenada, humana y sostenible".

El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha reclamado más ayuda de la UE para Marruecos, pero también para países como Mauritania y Senegal, de la que han recibido hasta ahora para ayudarles a gestionar los flujos migratorios.

"Hay que ayudar a Marruecos mucho más", ha defendido Borrell en rueda de prensa posterior a la reunión de los Veintiocho, pero también a los países de la fachada atlántica de África, es decir, Mauritania y Senegal que, en su opinión, también deben recibir "más ayuda de la que hasta ahora se han dado hasta ahora". "La necesitan", ha apostillado.

Borrell ha incidido en que los flujos migratorios no se han reducido sino que "se han desplazado" del Mediterráneo central al occidental y ha reclamado la necesidad de "abordar estructuralmente este problema", provocado por los desequilibrios demográficos y de rente entre Europa y África.

"No hay otra frontera más desigual que el Mediterráneo", ha avisado el jefe de la diplomacia española, que ha admitido la necesidad de "buscar soluciones coyunturales" entre tanto.

LIBIA

Mogherini también ha puesto en valor el trabajo de cooperación de la UE con el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM en Libia --37.000 han sido devueltos a sus países de origen desde Libia y 1.536 refugiados han sido evacuados-- aunque ha admitido que los países de la UE deben ofrecer más plazas para ayudar a Níger a reubicar a refugiados que necesitan protección internacional y ha vuelto a pedir más fondos a los Gobiernos europeos para el fondo fiduciario para África.

La jefa de la diplomacia europea ha asegurado que "todos los Estados miembro han indicado que quieren mantener y continuar" la operación naval contra las mafias que trafican con inmigrantes en el Mediterráneo y este lunes han acordado "estudiar vías para que los Bancos Centrales nacionales" de los Veintiocho "puedan ser más eficaces a la hora de determinar quién está actuando en que frentes, ya sea en el tráfico de petróleo, armas o personas y el impacto de esto en la financiación de las diferentes milicias" en Libia.

El comandante de la operación de la UE contra las mafias de inmigrantes en el Mediterráneo central, Enrico Credendino, ha admitido que hay "voluntad" de los gobiernos para extender su mandato, que vence en diciembre, hasta 2020 aunque queda "pendiente" acordar "el desembarco y la redistribución" de los inmigrantes rescatados, "una cuestión muy política, que deberá discutirse y decidirse al máximo nivel político".

Mogherini también ha pedido que los países europeos con asiento en el Consejo de Seguridad de la ONU se coordinen "estrechamente" con el enviado especial de la ONU en Libia, Ghassan Salamé, sobre la idea de sancionar a las milicias que obstruyen una salida a la crisis libia.