El vocal portavoz del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) en materia de migraciones, Álvaro Cuesta, ha llamado este lunes desde el sur de Gran Canaria a los jueces y magistrados a comprometerse en contra de los discursos que buscan alentar entre los ciudadanos el miedo al inmigrante.

Cuesta ha inaugurado este lunes en Maspalomas la nueva edición del curso para jueces sobre Derechos Humanos e Inmigración que organiza el CGPJ, con un discurso en el que ha reconocido que suscribe todas las recomendaciones del Defensor del Pueblo sobre lo ocurrido en el muelle de Arguineguín hace un año y, en general, sobre el sistema de acogida a quienes llegan en patera.

En su intervención, el vocal del CGPJ ha señalado que ya hay pensadores que defienden que "el gran acontecimiento de la primera década y de la segunda incluso de este milenio es la entrada en la ortodoxia política del discurso contra la inmigración".

"Para algunos, la única manera de introducir pasión y de movilizar en el discurso político es mediante el miedo a los inmigrantes, a los diferentes. Consiste, en privilegiar a la propia tribu frente al otro, al bárbaro", ha señalado, para después añadir, dirigiéndose a los jueces que le escuchaban en el curso: "De nosotros, de nuestro compromiso, depende que no sea así".

El vocal del CGPJ ha defendido la necesidad de que toda respuesta que se dé a la realidad generada por la llegada de inmigrantes y refugiados "esté presidida por el lenguaje de los Derechos Humanos".

Cuesta ha abogado además por impulsar una nueva reforma de la Ley de Extranjería, que ataje situaciones de hecho como las que sufren los inmigrantes detenidos por una mera infracción administrativa (traspasar las fronteras sin permiso no está tipificado como delito en España) y, en particular, los recluidos en Centros de Internamiento para Extranjeros (CIE).

El vocal del Consejo ha recordado que quien está en un CIE legalmente solo ha perdido uno de sus derechos, el de la libre deambulación por el territorio, pero conserva todos los demás.

Pero la realidad, ha advertido, demuestra que un inmigrante en un CIE "tiene menos garantías y medios", sin haber cometido delito alguno, que "un preso recluido en un centro penitenciario".

Cuesta ha confiado, asimismo, en que este curso sobre migraciones permita a los jueces acercarse "a la degeneración contemporánea consistente en usar a las personas como escudos humanos".

"Nos va a permitir acercarnos a esa situación propiciada por Marruecos en Ceuta o Bielorrusia en la frontera polaca, al llamado 'ataque híbrido' en el conflicto entre países", ha señalado.

También ha criticado el vocal del CGPJ la "falta de solidaridad" de algunas comunidades autónomas con las regiones que reciben directamente a la inmigración en sus costas y que tienen que asumir el cuidado y la tutela de un número de menores no acompañados superior la capacidad con la que cuentan sus servicios sociales. EFE

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