El Consejo Europeo, a través de un dictamen publicado este jueves, ha reconocido los avances de España en la prestación y protección social del pueblo gitano, aunque también señala algunas carencias que, en este sentido, siguen persistiendo. Es por ello que recomienda al país poner en marcha una legislación integral contra la discriminación.

A través de dicho dictamen, el órgano europeo ha evaluado el cumplimiento de España en relación a sus compromisos con la población gitana española en virtud del Convenio Marco para la Protección de las Minorías Nacionales.

En el documento, recogido por Europa Press, se reconoce que España se ha mantenido activa en la promoción de la igualdad de los gitanos a través de políticas y programas específicos para contrarrestar su exclusión social. Además, cree que el nivel de integración de este pueblo entre los españoles, así como el clima de tolerancia en la sociedad y en el discurso político hacia esta comunidad, son en general satisfactorios.

"Es evidente que se han logrado algunos avances significativos durante el período que abarca el informe en el rendimiento escolar y las políticas de asistencia y salud y realojo en algunas partes de España, así como en las relaciones entre la policía y la comunidad romaní", señala el texto.

Sin embargo, la Comisión Consultiva destaca que la discriminación de los romaníes persiste a nivel local y regional en determinados ámbitos, como la educación, el alquiler de viviendas y el empleo.

En este sentido, el Consejo Europeo ha llamado a las autoridades a hacer cumplir la asistencia escolar obligatoria hasta los 16 años y a poner en marcha programas específicos para erradicar los barrios marginales que aún existen en algunas comunidades autónomas proporcionando a los romaníes una vivienda digna y adecuada.

A su juicio, las diferentes administraciones españolas también deberían redoblar sus esfuerzos para empoderar a los romaníes, en particular las mujeres y las generaciones más jóvenes, para que participen más activamente en los asuntos públicos y la vida política. La reciente elección de cuatro miembros del Parlamento de origen étnico romaní autoproclamado es una señal positiva.

En este sentido, las autoridades europeas destacan la "falta de una legislación integral contra la discriminación". De hecho, celebra que el Ejecutivo esté preparando una norma para la igualdad de trato en el país.