El Juzgado de primera instancia número 3 de Palencia ha condenado al servicio de Sanidad de Castilla y León, Sacyl, a pagar una indemnización de 290.000 euros a una paciente que, por sucesivos errores médicos, perdió el útero y el uréter y necesitó un autotrasplante de riñón tras el parto.

La sentencia, facilitada por la Asociación El Defensor del Paciente, estima todos los argumentos de la demanda y condena a la aseguradora de Sacyl como responsable por la "defectuosa asistencia médica" que recibió una paciente de 34 años en abril de 2015 tras dar a luz a su hija en el hospital Río Carrión de Palencia.

La mujer, representada por el abogado Santiago Díez, de El Defensor del Paciente, tendrá que ser indemnizada por las secuelas físicas y morales, las lesiones temporales, las intervenciones quirúrgicas y la ausencia de información, a causa de los sucesivos errores médicos sufridos.

Como consecuencia de las lesiones que sufrió, se debió practicar una histerectomía a la paciente, con una hemorragia incoercible, por lo que ya no puede tener más hijos.

Además, el arrancamiento del uréter le ha supuesto varias cirugías consecutivas hasta llegar a un autotrasplante de riñón.

Asimismo la mujer sufre alteraciones del tránsito intestinal debido a las adherencias peritoneales que padece como consecuencia de las múltiples cirugías a las que se ha visto sometida, infección urinaria de repetición, y una importante afectación a nivel psíquico que ha precisado tratamiento médico.