Los jardines de las casas en España se caracterizan por contar con diferentes adornos que hacen que se conviertan en un espacio diferente y único en el que se puede realizar una diversidad amplia de actividades. Desde leer, y meditar, hasta hacer ejercicio y realizar alguna pequeña celebración si por suerte se cuenta con un espacio lo suficientemente grande para poder realizarlo. Normalmente, en las grandes ciudades es poco frecuente encontrarnos con grandes espacios de este tipo, en concreto en las zonas más céntricas.

Sin embargo, hay quien tiene la posibilidad de crear estos pequeños espacios de biodiversidad en los que poder efectuar todo tipo de actividades y hacerlo de manera original. Por ello, lo que no puede faltar nunca en un buen jardín es, ante todo, tener buen gusto. Existen variantes de todo tipo para dar personalidad a nuestro jardín; utilizar flores, cuidar el césped de manera frecuente, o incluso añadir un paso más colocando un pequeño huerto en el que colocar algún tipo de hortaliza, verdura o árbol frutal.

Pero sin lugar a dudas, el punto que podría llegar a marcar diferencias considerablemente respecto a los demás, es añadir una fuente. Normalmente, estos elementos requieren de diferentes precios que, generalmente no son muy baratos, y además de instalaciones más complejas para elaborar. A pesar de ello, hoy vamos a averiguar como diseñar una fuente completamente casera que sea mucho más asequible y rápida de crear.

Fuente de tiestos

Una forma muy rentable de hacerlo, es emplear macetas y tiestos antiguos que ya no se aprovechen. Usando estas alternativas se podría construir de manera sencilla. Pongamos el ejemplo de que la vamos a construir de tres niveles; estos serían los pasos a seguir:

• Primeramente, debemos estar atentos por si nuestras macetas cuentan o no con orificios en su parte inferior. Normalmente, tienen esta parte, pero puede ocurrir que no se halle. En este último caso, conviene realizar un surco con un taladro, para poder dejar paso a la bomba de agua.
• El siguiente paso consiste en introducir los tubos del agua entre los diferentes tiestos. Estos últimos deben ir colocados de abajo a arriba de mayor a menor tamaño y con la tubería introducida por los agujeros para transportar el agua desde la parte de la base.
• Debemos tener en cuenta que para que el agua pase sin problemas, la base de la fuente debe tener algo de holgura para que el líquido se introduzca sin problemas.
• Es importante sellar las piezas para que no se muevan. Por un lado, el tubo que transporta el agua hasta la cúspide de la fuente, se puede pegar con silicona. Mientras, las macetas pueden contar con un sellador como el cemento.

De este modo, se puede añadir una fuente a tu jardín aportándole dinamismo, y estilo particular para que seas la envidia de todo el vecindario. Si lo deseas, con una pintura adecuada se puede dar algo de color a la superficie de la fuente para que haga juego con el espacio en el que se colocará.