Canarias termina la jornada del sábado con cinco nuevas pateras llegadas a sus costas o rescatadas en aguas cercanas a las islas con 62 inmigrantes a bordo, cuatro en Gran Canaria y una en Fuerteventura, según informaciones aportadas por Salvamento Marítimo, la Cruz Roja y el 112.

La primera patera fue recogida por una embarcación de Salvamento Marítimo al sur de Gran Canaria a primera hora de la mañana, con 12 personas de origen magrebí a bordo.

La segunda llegó por sus propios medio a la playa de Veneguera, en la costa oeste de Gran Canaria, pasadas las 18.15 horas, con ocho varones magrebíes en buen estado de salud, y casi al mismo tiempo se detectaba otra con dos hombres a bordo en Fuerteventura, que acabó desembarcando en Caleta de Fuste.

Sus dos ocupantes fueron detenidos nada más tocar tierra, tras haber navegado en paralelo a la costa durante kilómetros, con un rumbo que parecía huir de los equipos de emergencia que llamaban su atención desde el litoral.

A partir de ese momento, se sucedieron más llegadas y falsas alarmas en Gran Canaria: 14 varones magrebíes en buen estado desembarcaron en el muelle de Puerto Rico, en el sur, mientras se recibía el aviso de la llegada de otra barquilla a la cercana playa de Amadores, que finalmente resultó ser una falsa alarma.

En torno a las 22.40 horas, Salvamento Marítimo avisó a la Cruz Roja de que había socorrido a una patera con 26 inmigrantes subsaharianos a bordo en aguas cercanas al sur de Gran Canaria.

Se trata de 16 hombres, siete mujeres y tres menores, que serán trasladados al puerto de Arguineguín.

Una portavoz de la ONG Caminando Fronteras ha señalado a Efe que esa relación de hombres, mujeres y niños coincide con el pasaje de una patera que partió el jueves de madrugada desde Dajla (Sahara Occidental), ciudad situada a 450 kilómetros de Canarias.

Además de estas cinco llegadas, a lo largo de la noche pueden confirmarse alguna más, ya que la Salvamar Menkalinan está de regreso a la isla tras una tarde de búsqueda en alta mar al sur de Gran Canaria y, en la misma isla, las fuerzas de seguridad rastrean la costa comprendida entre el aeródromo de El Berriel y la playa de San Agustín al tener indicios de que otra patera se dirige a esa zona.