El teniente de alcalde de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, ha explicado que la familia que ha fallecido este martes en el incendio llevaba dos años viviendo en el local ocupado de una antigua oficina bancaria y que, en principio, no tenía la luz "pinchada".

Una pareja y sus dos hijos -uno de 3 años y, otro, un bebé de meses- han muerto, mientras otras cuatro personas han resultado heridas por intoxicación de humo en el incendio que se ha declarado sobre las seis de la mañana por causas que se están investigando.

En declaraciones a TV3, Batlle ha explicado que esta familia llevaba dos años viviendo en este local, que ha descrito como "amplio" aunque ha admitido que no reunía las condiciones de habitabilidad de una vivienda para residir en él por tratarse de un local comercial.

Si bien no reunía las condiciones de habitabilidad, su "estructura tampoco amenazaba un peligro como hundimiento", ha agregado Batlle.

Ha subrayado que los informes técnicos que se tendrán que concretar ahora indican que la familia disponía de luz y agua, y que no tendrían el suministro eléctrico "pinchado" de la red.

Según ha informado el teniente de alcalde de Seguridad en el consistorio barcelonés, ha habido varias quejas y denuncias vecinales concretas por las "molestias de convivencia que se podían producir".

Batlle ha lamentado este siniestro que, ha dicho, dadas las condiciones en las que se ha producido "nos tiene que interpelar" desde el punto social.