La actividad de financiación e inversión de Triodos Bank en 2018 supuso cerca de 176 kilotoneladas (176.000 toneladas) de CO2 equivalentes de emisiones, secuestró en torno a 50 kilotoneladas y evitó cerca de 1.000 kilotoneladas.

Según refleja la entidad bancaria en su Informe Anual 2018, los resultados se han logrado mediante la inversión en proyectos de energías renovables y de ahorro de energía, que evitaron 985.000 toneladas de CO2 equivalente, es decir, el equivalente a recorrer en coche más de 5.400 millones de kilómetros.

Triodos Bank es el primer banco en España que mide y publica la huella de carbono de su cartera de préstamos e inversión, mediante la metodología Platform for Carbon Accounting Financials (PCAF) ha sido desarrollada por 14 entidades financieras.

La metodología surgió a partir de una colaboración entre instituciones financieras para medir y publicar sus emisiones de carbono y facilitar así su reducción. Se trata de una medida de carácter voluntario dirigido a que las entidades se ajustan a los compromisos del Acuerdo del Clima de París.

El director general de Triodos Bank en España, Miguel García-Prieto, ha destacado que desde el origen, la cartera de préstamos de Triodos Bank está orientada en su totalidad a empresas y organizaciones que mejoran la calidad de vida de las personas y el entorno y confía en que con esta medición la entidad podrá establecer objetivos de reducción de emisiones de CO2 y monitorizarlos.

"Es un paso fundamental e invitamos a otras entidades a darlo para que el sector financiero se oriente firmemente hacia la sostenibilidad y sea motor del cambio", ha añadido.

Durante 2018, Triodos Bank invirtió en energías renovables, mediante la financiación de proyectos de silvicultura y conservación de la naturaleza gracias a los cuales se han absorbido unas 24 kilotoneladas de CO 2 eq., lo que equivale al menos a 367.000 árboles maduros.

Asimismo, invirtió 717.000 metros de inmuebles sostenibles en 2018; 540.000 metros cuadrados agricultura y alimentación ecológica, que produce un equivalente a 32 millones de comidas (30 millones en 2007); 550 iniciativas educativas que beneficiaron a 680.000 personas y a instituciones culturales como cines, teatros y museos de toda Europa, con 22,6 millones de visitantes frente a los 17,6 millones de 2017.

A lo largo de 2018 la plantilla de la entidad aumentó en 50 personas, lo que supone un aumento del 3,6 por ciento, hasta las 1.427 personas. La plantilla está compuesta por un 49,3 por ciento de mujeres y un 50,7 por ciento de hombres y la proporción de mujeres en puestos directivos se sitúa en el 39 por ciento. En 2018 en las oficinas centrales la relación del salario más bajo y el más alto se mantuvo en una proporción de 9,9.