Se llama Villa Solitaire y desde luego las imágenes invitan a evadirse de todo. Se trata de una obra maestra del arquitecto italiano Matteo Thun  y que está situada en la parte más elevada de Son Vida, una de las áreas más exclusivas de la isla de Mallorca. “La villa, que se alza en medio de su propio jardín botánico privado, cuenta con unas vistas panorámicas espectaculares de la Bahía de Palma”, afirman Pierce Broderick y Catalina Quetglas, propietarios de la inmobiliaria alto standing  John Taylor en Palma que gestionará la venta de esta vivienda que según aseguran es la más cara de España. 

El acuerdo de la venta de esta impresionante villa  se firmó hace pocas semanas con un precio que asciende a 65 millones de euros. 

Está construida sobre un terreno de 4.250 metros cuadrados y a ocupa una superficie de 2.300 metros cuadrados repartidos en  siete dormitorios, seis cuartos de baño, 2 piscinas y terrazas de 2.000 metros cuadrados.ñ 

En total cuenta con cuatro plantas: la planta baja con la zona de día, el primer piso cuenta con la zona de noche, la terraza-azotea con un cine al aire libre y el sótano con espaciosos aparcamientos  para seis coches, un sistema audiovisual que permite convertirlo en su propio club privado, un gimnasio con sala de tratamientos corporales y el área para el personal. En el vestíbulo se encuentra un ascensor acristalado que llega hasta las zonas de día y de noche.

“La enorme sala de estar en la planta baja dispone de unas puertas de cristal correderas que se abren completamente al exterior y permite una calidad de vida extraordinaria. Es un impresionante espacio abierto con dos zonas diferenciadas entre la espectacular sala de estar con una insólita chimenea abierta, un lujoso comedor y una cocina satélite”, explica Tanja von Busse.

La fachada de Villa Solitaire es una representación dinámica de velas de barcos flotando sobre la planta baja. Orientada al sur y con total privacidad, su interior está lleno de luz natural que recibe desde diversos puntos de la bahía. 

La mezcla de interiorismo y muebles singulares, como las camas que son piezas únicas de Minotti, y de marcas exclusivas como Giorghetti y Liebhauser Home, todo elaborado a medida exclusivamente para esta propiedad, utilizando los mejores textiles de prestigiosas compañías tales como Rubelli o Dedar, sólo a modo de ejemplo, han logrado que el interior sea exclusivo y lleno de personalidad.