Un camionero detectaba que su camión perdía adherencia a la altura del muro que linda con el camino viejo a San Juan de Moró, en la partida Santa, justo debajo de la planta, a causa de un liquido con espuma. Tras la llamada del camionero, se desplazo una unidad de la policía local que comprobó que el líquido vertido provenía de dos de los aliviaderos de la planta de tratamiento de residuos de Reyval y que cruzaba el camino hasta fincas lindantes con el mismo, generando una espuma densa. Acto seguido se comunica a la policía autonómica los hechos y una patrulla se personaba en el lugar sobre las 19 horas. Tras una primera inspección visual, la patrulla entró en la empresa para conocer el origen del vertido, que se detectó en una trapa inundada por el agua de la caldera -según un trabajador de la empresa-. La empresa limpió el camino afectado con sepiolita, sin que se hiciera nada con lo vertido a la finca colindante donde desagua el camino afectado.