La alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, y el consejero de Obras Públicas, Política Territorial y Política Local, Antonino Burgos, han dado a conocer la puesta en marcha de un servicio de mediación integral entre las familias en riesgo de ser desahuciadas y sus entidades financieras, a fin de evitar la pérdida de la vivienda. “Se intentará -ha concretado la alcaldesa- no llegar al desahucio, mediante la renegociación de la deuda, la dación en pago, el alquiler u otras fórmulas que puedan aplicarse”. La gestión correrá a cargo del IRVI, cuyos profesionales especializados en el ámbito jurídico y de la mediación asesorarán e incluso acompañarán a estos afectados en la negociación de sus hipotecas. Según ha explicado el consejero, “dentro del servicio de atención a estas familias que llevamos cerca de un año prestando, y de nuestras conversaciones con la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, detectamos que había un problema que no teníamos cubierto: la fase previa al desahucio, en la que todavía se podía mantener a estas familias en sus hogares”. Hasta el momento estas personas realizaban ellos solos los trámites con los bancos, o con el apoyo de la Plataforma. “A partir de ahora podrán reforzar su posición de negociación con personal de la administración”, ha señalado Burgos. La pretensión es -ha continuado- que el denominado “Programa prioritario de mediación integral en materia de ejecuciones hipotecarias de vivienda habitual” sitúe “en un plano real de igualdad al deudor hipotecario, a menudo la parte más débil, y a las entidades financieras”. Este nuevo servicio se une a otras medidas adoptadas durante el año pasado, como el servicio de información, las ayudas económicas al alquiler -que pueden alcanzar hasta el 80 por ciento de la renta durante dos años-, o la puesta a disposición de estas familias de una bolsa de viviendas para facilitar el alquiler.