Esta tarde Rajoy celebra una reunión con los barones autonómicos del PP. Sobre la mesa un asunto difícil de resolver: el objetivo de déficit para este año. Algunos líderes populares que el año pasado cumplieron con el objetivo establecido están en contra de que las Comunidades Autónomas incumplidoras reciban un trato de favor.Rajoy lo tiene difícil para justificar un trato diferenciado que se puede considerar un agravio comparativo. Pero la gestión de anteriores gobiernos autonómicos, especialmente en Cataluña, hace prácticamente imposible establecer como objetivo de todas las Comunidades Autónomas una reducción hasta el 1,2 por ciento.Difícilmente se puede resolver el problema sin que este año algunas Comunidades Autónomas tengan un trato diferenciado de forma excepcional. El Gobierno podría aprovechar este grave problema para afrontar el cambio del sistema de financiación autonómica. El actual es muy enrevesado y favorece que las Comunidades Autónomas no sean responsables de sus finanzas. Es una de las grandes reformas que están pendientes. Sin abordarla será muy difícil caminar hacia un equilibrio presupuestario que permita rebajar la presión fiscal. Y sin bajar de algún modo los impuestos es muy difícil conseguir la necesaria reactivación del consumo.