En una emocionada comparecencia que ha tenido lugar en el Ayuntamiento de San Fernando de Henares, localidad madrileña donde residían ambos, Miguel Ángel Escribano ha querido dar las gracias a todo por las muestras de cariño recibidas.

También ha querido lanzar un mensaje a la policía de aquel país. Les pide que “no descansen hasta encontrar al cobarde asesino que mató a Arancha. Me lo deben a mí, a mi familia y a los muchos españoles que vamos a Costa Rica. No tendremos paz hasta ver al asesino entre rejas”.

"Salió a correr cerca del hotel y no volvió"

Miguel Ángel ha relatado con todo empezó con un viaje que emprendieron el 1 de Agosto junto con 12 españoles. Iba a ser el viaje de sus vidas, pero se convirtió en una pesadilla la mañana del pasado sábado. Arancha, según cuenta Miguel Ángel, salió a correr cerca del hotel y no volvió. La encontraron desnuda a tan sólo 50 metros. Presentaba síntomas de asfixia y todo apunta un móvil sexual.

En este sentido, el marido de Arancha denuncia que nadie, ni las autoridades españolas, ni las costarricenses, ni el guía, ni siquiera el propio hotel, les advirtieron de los peligros de la zona. Peligros que, después del suceso, han ido descubriendo. Todos les vendieron un lugar paradisíaco y seguro.

Por eso pide al gobierno de España que mande a agentes de la Policía y de la Guardia Civil para que ayuden a los responsables de aquel país a esclarecer este crimen. Asegura que todo apoyo “será bienvenido”.

Recordemos que la policía costarricense detuvo en pocas horas a tres personas en relación a este caso. Todas las sospechas recaen en un nicaragüense de 31, trabajador de un hotel cercano.

Además ha tenido emocionadas palabras hacia su pareja. Afirma Miguel Ángel que España ha perdido “un ángel, una persona muy generosa, de mucho tesón entrega. Una de esas que sólo nacen de vez en cuando”. Por eso él se va a encargar de recordarla en una página de Facebook que ya se puede visitar y que se llama “El Manifiesto de un Ángel”.