Damià Abella, exjugador de Osasuna la pasada temporada y actualmente en el Middlesbrough inglés, ha acudido hoy al Palacio de Justicia de Pamplona para comparecer ante el juez por el supuesto amaño del partido Espanyol-Osasuna del pasado año, causa por la que ha quedado imputado. Damià, que ha entrado y salido por la puerta del juzgado de guardia con su abogado, no ha querido desvelar si ha declarado ante el magistrado o bien se ha acogido a su derecho a no declarar, aunque ha estado muy poco tiempo delante del juez Fermín Otamendi, apenas diez minutos. A su salida del juzgado, el exfutbolista de Osasuna no ha contestado a las preguntas de los periodistas, si bien ha hecho una breve declaración. "Gracias por el respeto que estás teniendo sobre mí. No voy a hacer declaraciones porque así entiendo que debo hacerlo. Seguro que encontramos un tiempo adelante para hablar y comentar lo que sea necesario", ha dicho Damià. El futbolista catalán se ha desplazado desde Inglaterra por la citación de juez Fermín Otamendi con motivo de la investigación abierta por el "caso Osasuna", en una doble trama de presuntos amaños de partidos y desvío irregular de dinero de la cuentas del club navarro por al menos 2,4 millones de euros. Fue el exgerente de Osasuna, Ángel Vizcay, el que en una confesión en enero ante la Liga de Fútbol Profesional implicó a Damià en el presunto amaño del empate del Espanyol-Osasuna de la penúltima jornada de la pasada temporada. Sin embargo, el testimonio de Vizcay, imputado en la causa, no fue del todo firme respecto a la participación de Damià en un presunto encuentro en víspera del partido, junto con el exosasunista Patxi Puñal, con el jugador del Espanyol Sergio García en un coche cerca del hotel de concentración. Tanto Puñal como Sergio García acudieron al Palacio de Justicia de Pamplona el pasado viernes y quedaron imputados, al igual que los futbolistas Jordi Figueras, Jorge Molina y Antonio Amaya por un presunto amaño de dos partidos del Betis de la pasada temporada. De todos ellos, solo Puñal declaró ante el juez Fermín Otamendi y después defendió su inocencia en un comunicado en el que calificó de "sarta de mentiras" el testimonio de Vizcay, mientras que el resto de los futbolistas se acogieron a su derecho a no declarar. Damià ha acudido al Palacio de Justicia de Pamplona en compañía de su abogado y no ha hecho declaraciones a los medios a su llegada.