El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha rechazado la interpretación que se está haciendo del delito de rebelión y ha reclamado "diálogo y voluntad de acuerdo" para solucionar la crisis catalana.
A través de las redes sociales, el lehendakari ha llamado a efectuar una "reflexión serena y profunda sobre la situación en Cataluña y en el Estado español", algo que a su juicio no ha sido posible "desde hace muchos meses" por el "contexto de política absolutamente judicializada y con una extrema confusión de procedimientos leyes y reglamentos".
Urkullu ha retirado su apuesta por "la política como herramienta para solucionar problemas" y ha subrayado que esta es la "única vía de solución" en Cataluña.
Ha afirmado además que causa "estupor" y "humillación" la interpretación que se está haciendo del delito de rebelión en el caso de personas con "responsabilidad política, social e institucional en Cataluña".
El lehendakari ha expresado su "preocupación por la desaparición del ejercicio de la política en su sentido más positivo", aunque ha confiado en que "la sociedad catalana sabrá afrontar con espíritu constructivo esta situación tan compleja", de la que el resto de actores políticos e institucionales del Estado no deben ser "ajenos".