La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha considerado hoy las encuestas del CIS como un instrumento más de trabajo y ha resaltado que miden las expectativas de los partidos en un momento muy concreto.

Sáenz de Santamaría se ha referido de esta forma al barómetro del CIS publicado hoy y en el que el PP desciende hasta el 24 por ciento en intención de voto (su peor registro desde noviembre de 1996 aunque sigue siendo el partido más votado), mientras que Ciudadanos se sitúa en segundo lugar con el 22,4 por ciento y el PSOE tercero con el 22 por ciento.

En declaraciones a los periodistas en los pasillos del Senado, la vicepresidenta ha insistido en que las encuestas son instrumentos de trabajo que miden la opinión en un momento determinado.

Ha recordado asimismo que, junto a las valoraciones políticas, miden también las preocupaciones de los ciudadanos, algo que ha considerado también interesante para tener en cuenta.

Al preguntarle si el PP se ve capaz de recuperarse de los datos que le auguran encuestas de este tipo, Sáenz de Santamaría ha insistido en que los sondeos del CIS miden la temperatura que existe en los diez días durante los que se realizan y ha evitado hacer más comentarios sobre esos datos.

"Es tradición hacerlas por parte del CIS y es tradición del Gobierno no comentarlas, desde la máxima independencia y autonomía que tiene este organismo", ha añadido.

Para ella, hay que estar mucho más pendientes de los números de la economía y del bienestar de los ciudadanos que de lo que pueden medir las encuestas en un lapso de tiempo.

Fuentes del Gobierno han hecho hincapié en el momento en que se realizó el barómetro del CIS conocido hoy, en plena crisis por el caso de Cristina Cifuentes, y que puede haber afectado negativamente a las expectativas del PP.

Los periodistas han preguntado a la vicepresidenta si se ve trabajando para la mejoría del PP como candidata al ayuntamiento o a la Comunidad de Madrid y ella se ha limitado a recordar que muchas veces se le ha planteado esta cuestión y siempre ha dicho lo mismo porque no puede decir otra cosa, en referencia a que es una cuestión que no corresponde ahora.