El presidente de Melilla, Eduardo de Castro, ha afirmado que el restablecimiento de las relaciones entre España y Marruecos "parece ser que va por buen camino".

De Castro ha hecho esta afirmación en respuesta a una de las preguntas planteadas por el PP en el pleno de control que se ha celebrado este viernes, en la que ha explicado que ayer, durante su participación en el homenaje a las víctimas de la pandemia celebrado en Madrid, tuvo oportunidad de hablar con varios ministros.

Entre ellos, ha citado al nuevo titular de Exteriores, José Manuel Albares, y la ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, con los que mantuvo una conversación en la que también estuvo presente el presidente de Ceuta, Juan Vivas.

"Nasser Bourita (ministro de Asuntos Exteriores de Marruecos) no cogía el teléfono. Ya lo coge a este ministro", ha apuntado De Castro en alusión a Albares, quien transmitió al presidente melillense que estaba diseñando una estrategia y que "las cosas van a cambiar" cuando lo tenga "todo encauzado de una forma diplomática", que es como él quiere.

Eso, según De Castro, es lo que le dijo textualmente el nuevo ministro de Asuntos Exteriores en la conversación que mantuvieron este jueves en Madrid.

"La contundencia del Gobierno está clara. Hay vías diplomáticas que se están abriendo", ha defendido el presidente melillense.

"La hoja de ruta, tengo la impresión de que ha cambiado y de que Marruecos no lo tiene tan fácil. Tengo la impresión de que han echado un paso atrás en sus relaciones con España y van a recuperarse", ha agregado De Castro, que cree que "hay que dejar que aterricen los ministros" tras los cambios efectuados por Pedro Sánchez.

"Están en una estrategia que va abriéndose el camino sobre Schengen, pero, como decía el ministro de Exteriores, hay que dar tiempo a las intervenciones y estrategias que el ministro ha empezado a diseñar", ha apuntado De Castro respecto a la conversación que tuvo con Albares en el homenaje.

La relación con Rabat atraviesa un momento complicado después de que España permitiera la entrada del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, a España el pasado mes de abril por "razones humanitarias". Posteriormente, Marruecos permitió que la entrada en avalancha de unas 10.000 personas a las ciudades de Ceuta y Melilla y retiró a su embajadora en España.