El alto comisionado de la ONU para la Alianza de Civilizaciones, Miguel Ángel Moratinos, ha abogado en Mérida por crear espacios de convivencia y entendimiento mutuo ante "el retorno del odio y las actitudes supremacistas" hacia el otro.

Moratinos ha hecho estas declaraciones a Efe antes de participar en la clausura del taller "Jóvenes Constructores de la Paz" de la Alianza de Civilizaciones de las Naciones Unidas, acompañado del vicepresidente segundo de la Junta, José María Vergeles, y del director general de la Agencia Extremeña de Cooperación Internacional para el Desarrollo, Ángel Calle.

El exministro de Asuntos Exteriores ha señalado que la alianza de civilizaciones es "una tarea ambiciosa y cada vez más urgente", ya que al "consenso internacional claro" en cuanto al cumplimiento de la Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible y la necesidad de "salvar el planeta", hay que abordar la respuesta a "cómo vivimos juntos y arbitramos mecanismos de entendimiento mutuo".

Para Moratinos, la principal amenaza a un orden internacional basado en la alianza de las civilizaciones es "el rechazo del otro", el "retorno del odio y las actitudes supremacistas", ya no solamente por razón de religión o de raza, sino "simplemente por eliminar al que no piensa como tú y es lo que da miedo".

Ve necesario crear plataformas que permitan a las sociedades comprender que la diferencia y la diversidad "no son un elemento negativo, todo lo contrario, son un elemento enriquecedor que ayuda a entender el mundo complejo que nos ha tocado vivir".

El alto comisionado de la ONU ve necesario prevenir y formar a las nuevas generaciones, aquellas que tomarán decisiones políticas fundamentales, dotándolas de "los instrumentos de entendimiento, diálogo y paz", de ahí que "Jóvenes Constructores de la Paz" sea "uno de los proyectos que más énfasis pone la Alianza de Civilizaciones".

En el programa "Jóvenes Constructores de Paz" participan 19 jóvenes, entre ellos las extremeñas Raquel Blanco y Chantal Terrón, únicas españolas del grupo, el resto procede de Marruecos, Iraq, Yemen, Egipto, Palestina, Líbano, Argelia, Irán, Emiratos Árabes Unidos, Túnez, Jordania y Siria.

Con edades comprendidas entre los 18 y 25 años, los participantes adquirirán herramientas necesarias para promover procesos de paz, prevención de conflictos violentos y radicalización, conocimientos que tendrán que revertir posteriormente en sus comunidades y entornos inmediatos a través de iniciativas, acciones concretas y proyectos.