El coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maíllo, cree que sería bueno que tanto el vicesecretario de Comunicación, Pablo Casado, como el portavoz del partido en el Ayuntamiento, José Luis Martínez Almeida, estén en la dirección de Madrid que se va a remodelar próximamente.

En una entrevista en TVE, Maíllo ha señalado que Casado es una persona "muy importante en la dirección" nacional y es "un referente en España y en Madrid", y "claro que sí" que podría formar parte de la nueva dirección madrileña.

Aunque ha recordado que su incorporación dependerá también de que así lo decida el próximo presidente regional del partido, Pío García Escudero, y de que el propio Casado lo considere.

Ha defendido además que ocupe también un lugar en la dirección José Luis Martínez Almeida, quien según ha subrayado está haciendo un "magnífico trabajo" en el Ayuntamiento "arrinconando a Podemos" con denunciar, reclamaciones y "comparecencias muy valientes".

Tras subrayar que Almeida "es una persona con una gran fortaleza" se ha mostrado a favor de incorporar "gente nueva" en la dirección, entre la que también ha hablado de alcaldes de la Comunidad.

Y todos ellos demostrarán que el PP dice la verdad cuando asegura que tiene "banquillo" en Madrid.

Maíllo ha señalado que el PP no ha optado por la gestora porque ésa es "siempre una decisión traumática" y "más complicada", y ha preferido este sistema por el que se mantienen vigentes los órganos -el comité ejecutivo y la junta directiva- pero se designan nuevo presidente y nuevo secretario general, Pío García Escudero, y Juan Carlos Vera.

Y ha explicado que García Escudero y Vera van a conformar un nuevo comité de dirección al que se incorporará "gente de fuera" y "gente que ya estaba" porque no se trata de hacer tampoco "tabla rasa".

El coordinador general ha recalcado en cualquier caso que, como ha hecho siempre, el PP buscará candidatos "potentes" tanto para la Comunidad como para la Alcaldía de la capital.

Fernando Martínez-Maíllo ha asegurado por otra parte que el PP no va a pedir a Cristina Cifuentes que deje el escaño porque esa es una decisión "que le compete a ella", además de reiterar que el PP tendrá 48 diputados, "esté ella o no", que apoyarán la investidura de Ángel Garrido.

Ha vuelto a defender la designación de Garrido como candidato a la investidura, un "ejercicio de responsabilidad" porque no era momento de hacer "grandes experimentos", y ha señalado que Ciudadanos le apoya porque dar paso al socialista Ángel Gabilondo con la "mochila" de Podemos, sería para el partido naranja un "suicidio" político.