Suenan las campanas de miles de iglesias en toda Francia haciendo eco a las campanas que repicaron hace un siglo para anunciar el final de la Primera Guerra Mundial. El Armisticio había sido firmado a las cinco de la mañana en un vagón restaurante situado en un claro de un bosque en Compiègne, y el alto el fuego se fijó para las once. 

Unos setenta jefes de Estado y gobierno, Donald Trump, ANgela Merkel, Vladimir Putin, Benjamin Netanyahu, Justin Trudeau, Felipe VI o Mohammed Vi están presentes ya en torno al Arco del Triunfo bajo el cual arde la llama en memoria de todos los soldados que han perdido la vida en la guerra..

Todos las personalidades han llegado esta mañana al Palacio del Elíseo y desde ahí, todos juntos remontarán los Campos Elíseos hasta la Plaza de l’Etoile. 

La ceremonia del final del Armisticio estará marcada por un momento de música, a manos del célebre violonista americano Yo-Yo Ma que va a interpretar la Sarabanda de la Suite nº5 para violonchelo de Juan Sebastián Bach, también interviene Angélica Kidjo que cantará en homenaje a las tropas coloniales que participaron en la Primera Guerra Mundial. Después, será el turno de un grupo de estudiantes que leerán los testimonios que en 1918 escribieron los que vivieron aquél momento. Finalmente, Emmanuel Macron pronunciará un breve discurso y avivará la llama que arde sobre la tumba del soldado desconocido mientras se oyen las notas del Bolero de Ravel.

El presidente francés quiere lanzar en esos momentos un mensaje político fuerte en defensa del multilateralismo para gobernar el mundo y evitar el resurgimiento de nacionalismos.

Tras el toque de "cese el fuego", todos las personalidades que han participado en la ceremonia regresarán al Palacio del Elíseo donde el presidente de la República y su esposa, Brigitte Macron ofrecerán un almuerzo.

Por la tarde, en el Parque de la Villette, situado en el noreste de París, la mayoría de los dignatarios participarán en el Forum por la Paz. Habrá una ausencia significativa, la del presidente norteamericano, Donald Trump, que no es partidario del multilateralismo sobre el que van a reflexionar los asistentes. Un multilateralismo que quiere ser un antídoto contra la guerra.

Emmanuel Macron ha querido conmemorar el centenario del final de la Primera Guerra Mundial, sus héroes y sus víctimas, con una especie de peregrinación por los lugares donde tuvieron las grandes batallas en el Norte y Este de Francia, convertidos en gigantescos cementerios, y que culmina este domingo ante el Arco del Triunfo rodeado de un centenar de jefes de estado y gobierno.

Este largo "camino de la memoria", como lo ha bautizado el Palacio del Elíseo, comenzó el domingo pasado en Estrasburgo, con una ceremonia militar seguida de un concierto en la catedral Notre-Dame. Emmanuel Macron estuvo acompañado por el presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, y juntos escucharon obras de Beethoven y Debussy para "celebrar la reconciliación franco-alemana".