El Gobierno de Islandia ha comenzado este lunes a relajar algunas de las restricciones impuestas por la pandemia de COVID-19 y, entre ellas, destaca la eliminación del uso de mascarilla en ciertas situaciones.

En concreto, los islandeses tendrán que utilizar mascarilla únicamente cuando asistan a eventos en los que las personas estén sentadas, como a ver una obra de teatro, ir a un centro religioso o a un evento deportivo.

Asimismo, más de 300 personas podrán reunirse desde el martes en restaurantes y pubs, que podrán estar abiertos hasta la medianoche. También, según las nuevas indicaciones emitidas por el Gobierno islandés, las personas podrán mantener una distancia física de un metro entre sí, en vez de los dos que regían hasta este momento.

Islandia no ha registrado ningún caso de COVID-19 en los últimos días prácticamente, y los que las autoridades han registrado se han confirmado en personas que ya estaban guardando cuarentena.

Mientras, la campaña de vacunación en Islandia continúa en curso y más de 200.000 personas han recibido ya al menos una dosis. De estos, más de 100.000 están completamente vacunados, en un país con unos 360.000 habitantes.