El candidato a presidir el PP José Ramón García-Hernández ha dicho hoy que el lunes presentará en Madrid el "contrato del nuevo PP con España" que plantea, con "principios firmes y reconocibles", una defensa de la lengua española en todo el país y la sanidad y la educación centralizadas.

Antes de intervenir en un acto con afiliados del PP de Cantabria, García-Hernández ha hablado de la desestimación, por parte del comité organizador del congreso, de "todas las cosas razonables" que pedían "los candidatos razonables para que este proceso fuera más abierto y transparente".

Sin embargo, ha añadido que "sabiendo cuáles son las reglas de juego, si son para todos", su candidatura va a "dar todo lo mejor".

García-Hernández ha señalado que afronta este proceso de elección del nuevo presidente del PP con "muchísima ilusión por el futuro que tiene que tener España" y ha recordado que su candidatura trabaja con propuestas "en positivo", para "un nuevo Partido Popular que es absolutamente necesario para la sociedad española".

El aspirante a liderar a los populares, que es el primero de los seis que se presentan que se acerca a Cantabria, ha explicado que su trabajo va enfocado a la figura del afiliado y a recuperar los "principios firmes" que han hecho al PP "grande" y "reconocible" en toda Europa.

Esos objetivos, según García-Hernández, se logran con una renovación del partido, con primarias para todos los cargos, limitación de mandatos y poder captar talento de nuevo.

Ha insistido en que su propuesta, que presentará el lunes en Madrid, va dirigida a firmar "un contrato del nuevo PP con España", con "unos principios firmes y reconocibles", también para sus "adversarios políticos".

"Porque el PSOE ha hecho una alianza con la extrema izquierda, con los independientes y con los filoetarras para arrinconar al PP en un rincón de la historia y nosotros no lo vamos a permitir", ha advertido.

García-Hernández ha asegurado que va a defender la lengua española en todo el Estado, que la sanidad y educación estén centralizadas y que el país se dote de los elementos necesarios para "hacer frente a todas las amenazas".

También ha abogado por colocar a la familia "como institución central de la sociedad" y por una discriminación positiva laboral para que la maternidad no sea "el techo de cristal de las mujeres".