La delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera, ha defendido hoy que el Ejecutivo acudió a la Comisión Bilateral Estado-Generalitat con el "trabajo hecho", pero ha remarcado que no pueden acordar un referéndum porque no cabe en la Constitución, ni interferir en decisiones de los jueces.

En una entrevista en Rac 1, Cunillera ha replicado así a las acusaciones de los consellers Ernest Maragall y Elsa Artadi de poca preparación de la reunión de la Bilateral por parte del Gobierno.

Cunillera ha aseverado que el Ejecutivo fue al encuentro, celebrado el pasado miércoles, "con papeles, números y trabajo hecho".

Ha afirmado que desconoce sobre "qué base" tiene Maragall la esperanza de que pueda haber en un futuro un referéndum acordado con el Estado y ha insistido en que la Constitución "ni insinúa" esa posibilidad.

Asimismo, Cunillera ha defendido que el Gobierno no puede interferir en decisiones judiciales sobre los presos soberanistas: "Tengo que respetar lo que hacen los jueces", ha remarcado.

En cuanto a si se debe cambiar el Código Penal para modificar el delito de rebelión, ha expresado que "legislar en caliente siempre es malo", por lo que debe haber un período de "reflexión".

Cunillera también se ha referido a la reunión de ayer entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Pablo Casado, quien le advirtió de que si en algún momento piensa que está "contemporizando" con los secesionistas o cediendo será el primero en denunciarlo.

La delegada del Gobierno ha ironizado que Casado está haciendo "un máster de jefe de la oposición" y ha apostado por "dejar pasar unos días" para que todo vaya por "un camino más razonable".

Por otro lado, Cunillera ha desvelado que ayer habló con el vicepresidente del Govern y adjunto a la presidencia de ERC, Pere Aragonès, para trasladarle su solidaridad por la protesta de ayer de los denominados Comités de Defensa de la República en su sede.

"Así no se defienden las ideas", ha juzgado la delegada, que ha recordado que los socialistas han sufrido "mucho" este tipo de situaciones.

También ha manifestado preocupación por actos de encapuchados retirando "esteladas", como sucedió en Verges (Girona), pues "todo lo que sea intolerancia es deplorable" y, en este contexto, ha prometido "toda la colaboración" de la Delegación del Gobierno para garantizar "la convivencia y el respeto".

La delegada ha destacado asimismo que el 1 de octubre la actuación "no fue adecuada" y ha afirmado que "le gustaría mucho" conocer "quién dio las órdenes" en los operativos policiales desplegados para impedir la votación.

Por otro lado, Cunillera ha aseverado que aspira a que Cataluña, en un modelo de financiación nuevo, esté tratada "con la justicia que le corresponde", pero ha advertido de que es necesario que el Govern participe en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).