El portavoz de Ciudadanos en la cámara catalana, Carlos Carrizosa, cree que el Parlament sigue "degradado" y "amordazado" un año después del "golpe a la democracia", cuando se aprobaron las leyes de "ruptura", y niega que hubiese una coordinación con el Gobierno del PP en aquellas jornadas.

En rueda de prensa en el Parlament, Carrizosa ha valorado así la situación del Parlament después de la aprobación de las leyes de "ruptura" los días 6 y 7 de septiembre del año pasado, y ha desmentido las afirmaciones del líder del PPC, Xavier García Albiol, quien hoy ha asegurado que el Gobierno del PP "paró el golpe de Estado" en coordinación con Ciudadanos y el PSC.

Carrizosa ha opinado que, un año después del pleno de "ruptura", el Parlament sigue "paralizado, degradado, vacío de contenido y amordazado", sin plenos en el calendario hasta el mes de octubre y con el intento de los grupos parlamentarios independentistas de "silenciar" a la oposición.

El dirigente de Ciudadanos ha culpado en buena medida de esta situación al presidente del Parlament, Roger Torrent, que sigue a su juicio los dictados del expresidente Carles Puigdemont, desde Bruselas: "Las instituciones de todos están instrumentalizadas", ha denunciado.

Carrizosa ha señalado que los independentistas no asumen que el "golpe a la democracia" de hace un año fue un "fracaso", por lo que prosigue el "atropello" de los derechos de los diputados y de la "mayoría de los catalanes".

Por otro lado, ha desmentido las afirmaciones de Albiol al asegurar que Ciudadanos no participó en ninguna "estrategia pactada con el Gobierno" de Mariano Rajoy.

Lo que sí hubo, ha precisado, fue una estrategia acordada entre los tres partidos constitucionalistas del Parlament -Cs, PSC y PPC- con iniciativas que provocaron frecuentes interrupciones de aquel pleno, con un doble objetivo.

El primero de estos objetivos, aclara, era para dejar constancia de la "vulneración" del reglamento de la cámara catalana y de los derechos de los diputados, como paso previo para presentar un recurso ante el Tribunal Constitucional, como la formación naranja hizo en su momento.

Y, segundo, ha dicho, para "visualizar" ante los catalanes el "abuso" y el "atropello" que estaban cometiendo los grupos independentistas.