La Comisión de expertos para la reforma de la financiación local, nombrada por el Gobierno, plantea reforzar la capacidad fiscal de los gobiernos locales con dos nuevos impuestos de carácter potestativo: un impuesto sobre estancias turísticas y un recargo sobre la cuota líquida del IRPF estatal.

El informe, publicado hoy por la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), entiende que un impuesto sobre estancias turísticas daría respuesta a aquellos municipios que, en determinadas épocas del año, tienen que desplegar un abanico de servicios más amplio del que corresponde a su población residente.

Por su parte, el segundo se aplicaría directamente por los municipios de más de 20.000 habitantes y a través de las diputaciones en el caso de los de menor tamaño.

Según los expertos, este último impuesto incrementaría "notablemente" la autonomía fiscal de los municipios, a diferencia de las actuales participaciones territorializadas en el IRPF, IVA e Impuestos Especiales, que proponen suprimir, "integrando sus rendimientos en la Participación en Ingresos del Estado (PIE)".

En el informe, los expertos también reconocen que la idea de un fondo autonómico de carácter incondicional a beneficio de los entes locales "no ha calado" hasta el punto de que en la mayoría de las comunidades lo que hay es "sucedáneos" que mezclan "distintas formas de transferencias con diversos grados de condicionalidad".

Por ello, la Comisión sugiere ampliar las competencias de los gobiernos locales en materia de servicios sociales y programas deportivos y culturales, en definitiva, de proximidad al ciudadano, y redefinir la función de las diputaciones que pasarían a centrarse en la gestión de servicios públicos y tributos en los municipios de menor tamaño.

También proponen "revisar en profundidad" el componente de transferencias del sistema de financiación local, que pasaría a tener un objetivo "explícito de nivelación", ausente en el modelo actual.