El Ministerio de Asuntos Exteriores está acelerando las gestiones para facilitar la repatriación del cuerpo de María Hernández, la cooperante española asesinada el pasado jueves en Etiopía donde trabajaba para Médicos Sin Fronteras (MSF).
La cooperante madrileña y otros dos colegas etíopes, todos pertenecientes a Médicos Sin Fronteras, fueron asesinados en un ataque cometido en Tigray, una región en el norte de Etiopía sumida en una guerra desde el pasado noviembre, según adelantó la ONG.
Según un mensaje difundido por Exteriores, la embajada de España en Etiopía está haciendo todas las gestiones para agilizar la repatriación del cuerpo de la cooperante, que ya ha sido trasladado desde la aldea donde se encontraba hasta Mekelle ,capital de Tigray, y de ahí hasta la capital del país, Addis Abeba.
El ministerio que dirige Arancha González Laya confía en que el último tramo de la repatriación, desde Addis Abeba hasta Madrid, pueda realizarse lo antes posible.
Por deseo de la familia, que ha pedido respeto a su intimidad, la llegada a España y posteriores exequias se celebrarán en la intimidad.
El pasado viernes, tras conocer la noticia, González Laya publicó un mensaje en su cuenta de Twitter en el que expresó su "gran tristeza por el asesinato de los cooperantes y aseguró que estaba en contacto con las autoridades etíopes para esclarecer los hechos y repatriar el cadáver.