La designación de Valencia como Capital Mundial del Diseño para 2022 podría atraer a la ciudad a unos 50.000 visitantes y generar un impacto empresarial de 29 millones de euros, según las estimaciones más "optimistas" anunciadas este martes por el alcalde, Joan Ribó.

Un día después de conocer la elección de Valencia tras imponerse a Bangalore (India), Ribó ha participado junto al president de la Generalitat, Ximo Puig, y los responsables de la candidatura en la presentación de los retos de esta capitalidad, entre los que destaca convertir el diseño en un generador de marca y elemento de cohesión de la Comunitat Valenciana.

Han coincidido en apuntar que es un "éxito" para Valencia y para todo el territorio, que ha sido posible "gracias a su creatividad", y en que será una "gran oportunidad" para la transformación del modelo económico y un reto en el que el diseño aúna esfuerzos de sociedad, empresas e instituciones.

Valencia Capital Mundial del Diseño celebrará durante 2022 más de un centenar de actividades con charlas, simposios o exposiciones, repartidas en el año y separadas cada mes con el diseño como hilo conductor y relacionado con materias de interés social como inmigración, perspectiva de género, sostenibilidad, música o deporte.

Según el alcalde, el diseño es capaz de "aportar soluciones consensuadas en retos como la sostenibilidad, el diálogo intergeneracional, la igualdad, la multiculturalidad o la gestión del espacio público".

El codirector estratégico de la candidatura, Xavi Calvo, ha explicado que el presupuesto del proyecto "no llega a 10 millones, uno de los más modestos", de los que entre el 40 y el 50 % será financiación pública y el resto patrocinios privados.

Y Ximo Puig ha valorado que la capitalidad es una "gran oportunidad" y un reto de convertir el diseño "en lo que debe ser el aterrizaje definitivo de la economía valencia en la nueva economía" y colaborar en la transformación del modelo económico.